La Familia Real ultima sus vacaciones en Mallorca. Un viaje que este fin de semana contó con una cena en la que doña Letizia volvió a hacer acopio de una característica que le ha acompañado durante este verano: renovar su vestidor con detalles muy sutiles, pero reveladores. Su estancia en Palma comenzó con un cambio de registro al apostar por un vestido para el tradicional posado a su llegada a la isla. Posteriormente, sorprendió al llevar bermudas, prenda inusual en ella desde que es Reina; o incorporar un nuevo código cromático para su estilismo más estival. Y ahora, como broche de oro para su verano más innovador ha querido llevar unos pantalones que no tienen referente entre sus elecciones previas, aunque encuentra la coherencia al recrear un patrón común: tonalidades neutras (o en su defecto, azul muy oscuro), cintura elevada y marcada verticalidad para estilizar la figura.
El detalle diferenciador de esta nueva elección con la colección de pantalones que posee en su vestidor (y que en esta galería fotográfica podrás ver comparado con sus elecciones de verano de los últimos años) es el estampado, pues, aunque las rayas es un motivo que seduce a la Reina, no lo había incorporado para este tipo de prendas. Esa pieza pertenee a la colección de temporada de Adolfo Domínguez (con abalorios de flecos laterales y confeccionado en poliéster y elastano, se trata de un diseño que se presenta como una reedición de una silueta icónica para la firma; y de su precio original de 118 euros, se puede adquirir en la actualidad por 49 euros). La Reina lo acompaña de blusa blanca, bolso bandolera de piel coordinada, de CH Carolina Herrera; y alpargatas negras con cuña, de Gaimo.
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