Costumbres de palacio: la falda años 50 que la Reina solo combina con los mismos zapatos
La monarca vuelve a sacar del armario por tercera vez este diseño 'lady' y de nuevo, elige sus favoritos de Magrit en color azul
La reina Letizia sigue siendo fiel a la máxima de reinterpretar sus looks antiguos a través de los complementos o de un cambio de beauty look. Cuando una prenda le gusta y le sienta bien no duda en darle una nueva oportunidad en sus actos oficiales. Ayer mismo, se volvió a poner por segunda un total look de Nina Ricci. Hoy, ha presidido junto al rey Felipe VI la inauguración oficial del curso académico 2017/2018 en la Universidad de Salamanca y ha utilizado la misma fórmula que en su acto anterior: es un dos piezas, tiene línea A y lo estrenó hace años. En esta ocasión es de Felipe Varela, su diseñador de cabecera, y lo ha utilizado al menos en tres ocasiones. Lo que más llama la atención es el estilo New Look de la falda, al más puro estilo Dior: talle alto, cintura marcada y mucho vuelo. Se puede considerar una de las prendas esenciales para elevar el atractivo de una mujer porque consigue potenciar las curvas de la forma más elegante. No es una silueta habitual en doña Letizia, ya que suele recurrir más a menudo a faldas lápiz. Sin embargo, en alguna ocasión nos ha sorprendido con la prenda más lady de su armario, como por ejemplo hace unos meses en su visita oficial a Inglaterra, donde hizo honor al país anfitrión con una falda de vuelo de la firma británica Topshop.
© Fernando Junco
Se trata de un dos piezas bicolor, con una chaqueta abotonada con peplum y confeccionada en tweed blanco. Su corte a la altura de la cintura encaja a la perfección con el talle alto de la falda, que es de raso azul noche, con una bonita caída y un largo a la altura de la rodilla. Además, lleva los zapatos a juego: unos salones con algo de plataforma, uno de sus trucos favoritos para resistir a los tacones. En cuanto al resto de complementos opta por unos pendientes en dos tonos, a juego de su estilismo y una cartera de mano de piel que sigue la misma línea cromática en azul. Sin embargo, vemos ligeros cambios con respecto a cómo lo lució en anteriores ocasiones. En primer lugar, en su beauty look: si esta vez ha llevado la melena suelta con raya a un lado, la primera vez que lo estrenó, en noviembre de 2014 durante una visita oficial a Bélgica, llevó un recogido con trenzas, uno de los favoritos de la Reina.
Tan sólo cambió los pendientes por unos más sencillos y añadió unos guantes de piel a tono con la falda. Sin embargo, el giro más radical lo dio en junio de este mismo año, durante la Reunión Anual con el Patronato de la Fundación Princesa de Asturias celebrada en el Palacio Real de El Pardo. Aquí consiguió un look más fresco, informal y radicalmente distinto simplemente cambiando la chaqueta por una blusa de seda y manga corta. Esta vez, también dejo su melena suelta y prescindió de complementos contundentes.