Los reyes Federico y Mary de Dinamarca se embarcaron este lunes en una visita de Estado de dos días a Suecia, con la que buscan fortalecer sus relaciones con los homólogos del país escandinavo. El viaje dio comienzo con una fastuosa ceremonia en la que participaron dos barcos reales que rara vez tenemos la oportunidad de ver. Los honorables invitados navegaron hacia Estocolmo a bordo del Dannebrog, la embarcación de su casa real danesa, antes de abordar la barcaza real sueca Vasaorden. La mujer del monarca, tan elegante como siempre, llegó vestida de azul marino, su color favorito, y con un nuevo tocado.
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Mary de Dinamarca aterriza en Suecia vestida de azul
Tras bajarse del avión, la reina de los daneses desveló el que sería su primer look durante esta visita de solo dos días a Suecia. Apostó por algunas de sus prendas preferidas, de esas que repetiríamos mil veces sin importar el tiempo que pase. Para ella, este es el caso de su vestido de tweed blanco a cuadros, una pieza que ha repetido hasta cinco veces desde que lo adquirió en 2018 y el cual es obra del modisto Mark Kenly Domino Tan.
Este vestido presenta un cuello redondo, mangas tres cuartos, detalles desflecados y una falda midi con vuelo que se ciñe a la altura de la cintura con un cinturón a contraste, el cual no viene incorporado al diseño. Eso sí, apenas podemos distinguir qué color de fajín eligió en esta ocasión para complementar el estilismo, dado que llevó encima un abrigo tipo capa azul marino.
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El formato de abrigo capa es uno sumamente elegante que fascina no solo a Mary de Dinamarca sino también a Máxima de Países Bajos y a nuestra propia reina Letizia. De hecho, la mujer de Felipe VI tiene en su armario varias creaciones del estilo bajo el sello de Carolina Herrera en colores como el camel, el beige e incluso el sobrio azul marino por el que optó la danesa en su primera cita del viaje. Y es que esta gama cromática es, sin duda, la predilecta de la madre de los príncipes Christian e Isabelle desde la proclamación de Federico X, que se celebró el pasado mes de enero.
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Un nuevo tocado de lazo XL con pendientes de diamantes 'vintage'
Como acostumbra, la reina de los daneses complementó el vestido blanco con accesorios de un mismo tono, el azul marino que tiñe su bonita capa de lana. Incorporó unos guantes de piel, para hacer frente a las bajas temperaturas primaverales de Suecia, en sintonía también con unos salones de Gianvito Rossi. La guinda sobre el pastel la puso su nuevo tocado, única pieza de estreno del look: un sombrero tipo pillbox de la firma Jane Taylor, que envuelve la cabeza para cerrarse en la parte posterior con un enorme lazo.
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Más de cerca, podemos apreciar que sumó unos pendientes colgantes de diamantes que datan de la Belle Époque; es decir, que tienen más de un siglo de antiguedad. Fueron adquiridos en una subasta a la empresa Bruun Rasmussen Auctioneers, a la que ha comprado muchas otras joyas vintage en los últimos años. Además de este par, llevó un brazalete de oro, de Cartier; otro similar, aunque con forma irregular, de Dulong Fine Jewelry, y una pulsera con diamantes y zafiros.