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Los bolsos pequeños han sido un fenómeno revolucionario en el mundo de la moda estos últimos años. La fascinación por estos complementos de culto en miniatura hizo una entrada tímida en pasarelas, pero fue con Le Chiquito de Jacquemus, en 2018, cuando realmente nos dimos cuenta de que aquello que parecía una microtendencia estaba comenzando a copar ya nuestra lista de deseos de moda. La mayoría, como a menudo sucede, no son cómodos, pues no nos permiten llevar poco más que la tarjeta de crédito, ni su asa - casi siempre corta- los convierte en prácticos. Pero, ¿da igual? En el universo del textil, la funcionalidad es una batalla pendiente… al menos si hablamos de accesorios.
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¡Adiós a los accesorios miniatura!
Si bien las prendas que vestimos entre diario, e incluso en ocasiones festivas, sí que nos han invitado a abrazar la comodidad, lo cierto es que en cuestión de bolsos nos hemos quedado atrás, y en lugar de apostar por aquellos que nos permitan llevar de todo, hemos reducido su tamaño al mínimo, cargando más que nunca nuestros bolsillos. Puede que aquí encontremos el sentido a la vuelta de las prendas 'cargo'. Sin embargo, hace tan solo unas semanas, una de las chicas que nos enseñaron que los minibolsos serían nuestro capricho, nos sorprendió con la corriente opuesta, estrenando un diseño XXL, y todos nuestros esquemas se rompieron de inmediato.
- Los looks de invierno más versátiles que puedes llevar año tras año sin aburrirte de ellos
Hablamos del día en que Hailey Bieber se enfundó en un llamativo abrigo de paño color burdeos de The Attico con hombreras 'maxi'… y lo lució a juego con un bolso de Chanel vintage de una de sus colecciones de 1997. Concretamente, nos fijamos en esa travel bag, una de esas siluetas de viaje sin ruedas y de forma rectangular en las que te cabe lo suficiente para pasar un día fuera (o para llevar contigo en el avión). Y ya sabemos lo que sucede cada vez que Bieber cautiva nuestra atención con un look: que lo queremos copiar.
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Street style y pasarelas coinciden: vuelven los bolsos grandes
Que la modelo haya escogido este complemento práctico no es casualidad. Aunque ella es una de esas referentes de moda que poseen la presencia (y fama) suficiente para sentenciar la vuelta de los bolsos oversize, lo cierto es que si nos fijamos desde hace meses en el street style, podemos observar una inclinación cada vez mayor hacia estos diseños grandes. Aunque todavía nos empeñamos en hacer malabares para encajar el monedero, el móvil y las llaves en un solo compartimento, lo cierto es que las pasarelas nos devolvieron la esperanza este pasado otoño, trayendo de vuelta su silueta opuesta.
- Diez bolsos de lujo en los que merece la pena invertir
Basta con ver los bolsos desbordados del desfile de primavera/verano 2024 de Miu Miu para comprobar que la moda parece darse cuenta de que, sí, necesitamos más espacio. La Andiamo tote bag de Bottega Veneta es otro buen ejemplo que lo demuestra. No queremos límites, sino todo lo contrario. En un momento en el que reclamamos más libertad estilística que nunca, resulta evidente decir que queremos practicidad. Y, para alcanzarla, resulta importante que podamos escoger entre llevar bolsos pequeños para momentos puntuales… o bolsos que nos acompañen del día a la noche.
Las fanáticas de estos últimos queremos diseños en los que quepa de todo, como en el de Mary Poppins. Desde básicos como la cartera, las llaves o el móvil, hasta un paraguas, el cepillo de dientes, una chaqueta por si acaso, zapatos de repuesto... y, por qué no, el maquillaje. Nunca se sabe a dónde te lleva el afterwork de la oficina.