Durante varios días, Suecia vive unas jornadas de festejos y celebraciones en los que los miembros de la Casa Real tanto sueca como de otros países nórdicos se han dado cita para celebrar el Jubileo de Oro del rey Carlos Gustavo, es decir, sus 50 años en el trono que, justo, se cumplen este 15 de septiembre. Ayer, por ejemplo, pudimos verlos a todos en un concierto donde, por ejemplo, causó sensación la princesa Estelle al reciclar un vestido de su madre, Victoria. Por otro lado, también vimos cómo Mary de Dinamarca es única al reciclar vestidos de gala y transformarlos. Ahora, el gran festejo ha tenido lugar en esta tarde, con la organización de una cena de gala en el Palacio Real de Estocolmo. Allí, el desfile de vestidazo y tiaras ha marcado una velada para la historia.
Sofia de Suecia y el vestido capa que fascina a la realeza
Por su parte, la princesa Sofia estaba elegantísima con un vestido que recoge una de las tendencias de gala que más gustan a las royals: los diseños con capa. En concreto, luce una creación en color blanco y estética nupcial de Safiyaa, que recrea ricos adornos florales en metal dorado. Para realzar su elección, recupera la tiara que lució en su boda con Carlos Felipe de Suecia el 13 de junio de 2013. En esta ocasión, la realza con pedrería en tono rojo. Y es que esta joya se puede customizar con diferentes piedras.
Mary de Dinamarca vuelve a acertar reciclando
Para esta gran velada, Mary de Dinamarca ha reciclado un vestido azul marino del diseñador danés Lasse Spangenberg. Todo apunta, según diversas fuentes, que es el mismo que la Princesa lo llevó por primera vez en la fiesta por motivo del 75º cumpleaños de la princesa Benedikte en la primavera de 2019; aunque, en esta ocasión, opta por transformar su cuerpo y anadirle uno de cristales bordados.
-Mary de Dinamarca y su fabulosa colección de vestidos de gala
Como joyas, destacaba su tiara, la misma que llevó en el día de su enlace con Federico de Dinamarca en 2004. Una pieza con perlas que es inolvidable y que recibió como regalo de bodas por parte de sus suegros y que puede customizarse con o sin perlas en la parte superior. La acompaña de unos pendientes de diamantes y aguamarinas.
Victoria y Magdalena, dos hermanas en colores suavizados
Otras de las invitadas más elegantes de esta cita histórica han sido las hermanas Victoria y Magdalena de Suecia, hijas del rey Carlos Gustavo. En concreto, la primera lució un elegante vestido de línea princesa que llamaba especialmente la atención por su acabado degradado en tono azul. Por su parte, la segunda optó por un vestido en gris muy claro con bordados de pedrería de la diseñadora británica Jenny Packham.
En cuanto a sus tiaras, Victoria de Suecia se decanta por la Fringe, que presenta 47 diamantes inspirados en los rayos de sol. Respecto a Magdalena, esta iba similar, pues lució la Frinde moderna que heredó de su madre, la reina Silvia. Esta última la recibió como regalo de su marido, el rey Carlos Gustavo, en el décimo aniversario de boda.
La gran tiara de Silvia de Suecia
La reina Silvia de Suecia acudió del brazo de su marido, el rey Carlos Gustavo, el homenajeado de la noche. Ella lució una joya que tiene un valor incalculable, la tiara Braganza. Históricamente, esta pieza de diamantes engarzados en oro y plata fue encarga por Pedro I para agasajar a su segunda esposa, Amalia de Leuchtenberg, con motivo de su boda.