Las carreras de caballos más famosas del mundo atrapan la atención de todo el mundo estos días. Más allá de sus noticias deportivas y el desfile fabuloso de tocados y pamelas que muestran sus invitadas, Royal Ascot, que se celebra en el condado de Berkshire, nos está dejando grandes anécdotas. Además, esta está siendo una edición muy especial, pues supone el debut de Carlos III y Camilla como Reyes. De hecho, esta última ya generó numerosos titulares al estrenar un broche al que estaba predestinada: el Courtauld Thomson Scallop-Shell Brooch. Un día después, la Reina cambió de look, y este también viene acompañado de una curiosidad al tratarse de un estilismo en el que se incorpora un vestido que nos resulta muy familiar.
La prenda preferida de Kate Middleton
La Reina ha apostado por una de las prendas preferidas de las mujeres de la aristocracia y la Familia Real británica para sus actos oficiales, el abrigo-vestido. A pesar de haber dado ya comienzo el verano, en Reino Unido todavía hace fresquito, por lo que este tipo de diseños se convierten en una apuesta elegante y práctica con la que resolver un look al instante. En el caso de Camilla, se ha decantado por un modelo de Anna Valentine con cuello camisero, manga larga, corte a la cintura y falda evasé por debajo de las rodillas confeccionado en un tejido en un favorecedor y romántico tono rosa empolvado.
-El reencuentro de los Reyes con el exmarido de Camilla marca el segundo día de Ascot
Lo ha acompañado de unos salones de tacón cómodo en tono topo, un bolsito de mano de piel en acabado metalizado y, como dicta el protocolo, guantes claros que ha llevado en la mano. Destacan también sus joyas, entre las que encontramos sus habituales múltiples pulseras finas de oro y un imponente choker de cinco hileras de perlas adornado con un broche central con una gran piedra morada rodeada de diamantes. En cuanto al tocado, ha rematado con una gran pamela de rafia en tono natural decorada con un lazo abstracto obra del prestigioso sombrerero Philip Treacy, al que recurre con asiduidad la princesa de Gales y que cuenta con otras clientas destacadas como Sarah Jessica Parker.
Recicla su look de invitada
Como decíamos, este estilismo no es nuevo, sino que Camilla ha apostado por la sostenibilidad (y el ahorro) recuperando de su armario una pieza significativa, ya que se trata del diseño que llevó en la boda del príncipe Harry y Meghan Markle en mayo de 2018. En aquella cita tan especial lo conjugó con el mismo collar y unos zapatos y bolso muy similares a los de hoy, pero prefirió llevar la pamela a juego, optando por una creación decorada con plumas en el mismo color rosa.