Entre todas las mujeres Grimaldi, Carlota Casiraghi destaca por sus elecciones de estilo tan transgresoras como sofisticadas, una técnica díficil de dominar que seguramente aprendió de su madre, Carolina de Mónaco. Prefiere las lentejuelas por encima de los diseños lisos y le fascinan los tonos potentes o metalizados, por lo que sus looks son siempre objeto de expectación máxima. No obstante, su presencia resulta poco habitual en las celebraciones del Día Nacional de Mónaco (llevaba tres años sin acudir), y vaya que se ha hecho notar en los actos de esta mañana con un diseño acolchado de alto impacto y complementos maximalistas.
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- Transgresor y con guiños a su madre, el estilo de Carlota Casiraghi a sus 35 años
Un look de estatuilla dorada
Mientras que otras invitadas de la familia, como Beatrice Borromeo o Alejandra de Hannover, se decantaron por estilismos propios de una ceremonia religiosa, con amplias pamelas o sobrios abrigos largos, Carlota Casiraghi ha decidido romper con los esquemas preestablecidos y sacar a relucir su faceta roquera con la ayuda de un vestido guateado de cuello perkins y mangas largas elaborado con un impactante tejido dorado, firmado por Chanel, que atrapó todas las miradas. Se trata de una pieza sacada de la colección Pre-Fall 2020 que -aunque en la pasarela se conjuntó con leggings de encaje, zapatos dorados y múltiples pulseras de perlas- la nieta de Grace Kelly ha llevado con medias de cristal y complementos ochenteros que recuerdan a su madre.
- El traje de pedrería de Carolina y otros lookazos vistos en el Día Nacional de Mónaco
A pesar de la majestuosidad de la prenda principal, la royal no se ha cohibido a la hora de escoger los accesorios, pues si bien ha optado un discreto calzado de tacón bajo y punta fina en color negro y un clásico bolso acolchado con cadena, también de la casa francesa, no han pasado desapercibidos sus macropendientes estilo vintage, confeccionados con oro y piedritas de colores, y sus brazaletes de eslabones dorados.
- Carolina y Carlota: el estilo monegasco de madre e hija vuelve a triunfar en Montecarlo
Las piezas de moda que unen a madre e hija
En este aspecto, ha emulado a la perfección el afán de Carolina de Mónaco por los complementos maximalistas, plagados de gemas preciosas y moldeados en formas espectaculares cual obras de arte. Los de Carlota parecen ser de una colección previa de la maison, aunque no se sabe con certeza desde hace cuánto forman parte de su joyero. Lo cierto es que con cada aparición pública ambas ratifican estas similitudes, coincidiendo ya sea con eternos trajes de tweed, vestidos metalizados o despampanantes accesorios.