Esta mañana, la Familia Real sueca y sus allegados se han reunido en la iglesia del palacio de Drottningholm para celebrar el bautismo del nieto menor de los reyes Julian Herbert Folke, el tercer hijo de Carlos Felipe y Sofia de Suecia. En vista de la posiblidad de congregar a sus miembros y conocidos cercanos al completo, después de meses prescindiendo de actos multitudinarios, nos ha permitido ser testigos de los estilismos de la princesa heredera Victoria de Suecia, su hermana Magdalena, las pequeñas, Estelle y Adrienne, y las madrinas del pequeño, que llegó al mundo el pasado 26 de marzo.
Esta mañana, la Familia Real sueca y sus allegados se han reunido en la iglesia del palacio de Drottningholm para celebrar el bautismo del nieto menor de los Reyes, Julian Herbert Folke, el tercer hijo de Carlos Felipe y Sofia de Suecia. La posiblidad de congregar a sus miembros y conocidos cercanos al completo, después de meses prescindiendo de actos multitudinarios, nos ha permitido ser testigos de los estilismos de las asistentes, que coincidieron en su gusto por las siluetas románticas, los motivos de flores y las mangas hiperbólicas. Entre ellas, se encontraron la princesa heredera Victoria de Suecia y su hija Estelle, la princesa Magdalena con sus hijas Adrianne y Leonore, así como las madrinas del pequeño, Stina Andersson y Frida Vesterberg; y otras amigas de Sofia, quienes se han congregado para el sacramento del bebé que llegó al mundo el pasado 26 de marzo.
Al igual que la madre del protagonista del día, Victoria de Suecia ha quedado fascinada por la estética bohemia de los años sesenta y setenta, plasmada indudablemente en este vestido fluido con cuello pussybow y mangas globo, modelo Adele de la firma By Malina, que ha combinado con un adorno floral en color lila, obra de la sombrerera Orjan Jakobsson; bolso rosa, de Red Valentino; y salones blancos, de Dior.
La anécdota esta imagen viene de la mano de Estelle, de nueve años, quien luce un vestido rosa con cuello babero blanco y mangas abullonadas que perteneció a su madre cuando esta tenía su edad. De hecho, la princesa Magdalena posee un ejemplar idéntico, aunque ha seleccionado otro diseño para sus dos hijas.
La hermana menor de Carlos Felipe y Victoria de Suecia se mantuvo fiel a su registro de vestidos románticos con detalles coloridos y especiales. Por ejemplo, la última vez que posó para las cámaras, con motivo del retrato familiar, acertó con un diseño floral de ensueño. En esta anhelada ocasión, ha seguido la misma línea con un espectacular vestido blanco de transparencias con bordado azul, cuello redondo, mangas farol y falda de volantes, firmado por Zimmermann. Completó este look con un bolso de hombro blanco con cadena dorada y tachuelas, de Valentino, un tocado de flores colgantes y salones en tono celeste, de L.K. Bennett.
Adrianne, de tres años, y Leonor, de siete, no bucearon en el armario de su madre, pero sí vistieron iguales, como hacían Victoria y Magdalena cuando eran niñas. Ambas llevan un modelo de cuello Peter Pan con miniestampado de flores, de Trotters, perteneciente a la colección Lily Rose.
Stina Andersson y Frida Vesterberg, dos madrinas a juego
El matrimonio compuesto por Stina y Johan Andersson guarda tan estrecha amistad con los padres de Julian que han sido escogidos como padrinos en este sagrado evento. Ella, que ejerce como diseñadora de calzado de mujer, ha acudido con un sobrio vestido de flores en color azul celeste con cuello alto de volantes al cuello, falda plisada al vuelo y mangas farol, que conjuntó con salones en el mismo tono. Sujetando su elegante moño bajo, un adorno floral en azul más oscuro, en perfecta sintonía con el resto del estilismo.
Stina Andersson y Frida Vesterberg, dos madrinas a juego
Otra de las íntimas amigas de Sofia de Suecia es Frida Vesterberg, con quien ha emprendido numerosas labores filantrópicas a lo largo de los años. Haciendo honor a su rol de madrina, ha sincronizado su look con el de Stina al escoger un vestido estampado del mismo estilo, con cuello alto victoriano, apliques de encaje, mangas globo y falda plisada. El suyo, sin embargo, presentaba tonalidades verdes y violáceas que conectaban con sus salones lila y su adorno floral rosa pastel.
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