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Después de un año atípico en el que las casas de moda han tenido que adaptar sus presentaciones, apostando por nuevas fórmulas como desfiles virtuales y eventos escalonados, parece que poco a poco la industria va recuperando cierta normalidad. Esta semana París acoge una de sus citas más emblemáticas, la Alta Costura, que está reuniendo a expertas en moda, celebrities y actrices, así como a royals y aristócratas. Ayer el show de Dior fue el gran evento de la jornada, y en primera fila pudimos ver por primera vez a Victoria de Marichalar, quien asistió junto a su padre e hizo gala una vez más de su característico estilo desenfadado.
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Básicos que siempre funcionan
La sobrina de Felipe VI adora las prendas sencillas de fondo de armario y para esta cita no ha querido cambiar de estrategia, aunque sí la ha adaptado para aportar toques más sofisticados y de tendencia, muy acordes a la ocasión. De esta manera, ha combinado dos de los básicos atemporales por excelencia: la camisa blanca y los vaqueros. Ha elegido una blusa con botonadura oculta que ha llevado abierta para crear un ligero escote en 'V' y, siguiendo un detalle que adoran las expertas, ha metido únicamente una parte del bajo por dentro de los pantalones. La ha combinado con unos jeans azules de efecto desgastado, un modelo de tiro alto y corte ancho que reafirma el adiós a los pitillo.
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Detalles que marcan la diferencia
Desde hace meses, numerosas celebrities han dejado claro que es hora de dejar a un lado (al menos por un tiempo) los pantalones ceñidos que tanto hemos llevado los últimos años, apostando por alternativas como los palazzo, los wide leg o los rectos como los que lleva Victoria. Además, la joven aristócrata ha ido un paso más allá y se ha sumado también a la 'controvertida' tendencia que adelantaban hace unas semanas Sara Carbonero y Tamara Falcó: la de los vaqueros rotos que todas llevamos en nuestra adolescencia y que nuestras madres no comprendían.
Ha completado el look con una blazer negra clásica, la Bar Jacket, que ha lucido sobre los hombros y accesorios que aportaban el toque diferente: un bolso de flores modelo Saddle diseñado por Maria Grazia Chiuri para la marca anfitriona y unos salones negros de tacón fino decorados con pedrería. Además, ha recogido su larga melena oscura en una trenza lateral que nos permitía apreciar a la perfección sus pendientes: uno largo y colgante y el otro tipo earcuff.