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Los reyes de Holanda retoman su agenda de viajes de Estado tras las medidas sanitarias con motivo de la pandemia del coronavirus con una visita a la República Federal de Alemania que concluirá el próximo miércoles, 7 de julio. A su llegada a Berlín, y para sus primeros compromisos que finalizarán con una cena de gala esta noche, la reina Máxima ha querido hacer gala de su espíritu más innovador. Si ya sorprendió su vestido que no necesitaba joyas o aquel diseño semitransparente con efecto 3D, ahora consigue el mismo efecto al estrenar una creación que muestra un estampado único, artesanal y con guiño a su país de origen, Argentina.
© Getty ImagesLos dibujos flores que hacen de su vestido una pieza exclusiva
En concreto para estos primeros actos en Alemania (los Reyes han participado en un encuentro con el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, y su esposa, Elke Büdenbender), Máxima de Holanda ha llevado un vestido sin mangas, con cuello a la caja y falda midi asimétrica, más corta por delante que por detrás. Se trata de una creación de Natan, firma que figura entre sus sellos favoritos. Sin embargo, lo que hace exclusiva esta pieza es que sobre ella se realiza un dibujo hecho a mano de motivos florales, rayas de inspiración vegetal e insectos que pertenecen a una colaboración de Pablo Piatti, artista de origen argentina que está afincado en Europa desde su juventud. Él fue invitado por la firma belga de Eduard Vermeulen para crear una colección cápsula con guiño oriental. Además, ha sido elegido para decorar con sus trazos las paredes de algunas de las tiendas más emblemáticas de este sello.
-El estilo de Máxima por su 50 cumpleaños: looks icónicos y poderosos complementos
© Getty ImagesUna diadema a juego, el tocado perfecto
Para conseguir un mayor énfasis en su look, Máxima busca la coordinación de su vestido con una diadema a juego. Es un tocado muy ancho que genera el efecto de falso casquete. Además, luce guantes blancos que aportan a su imagen un acabado más formal y cartera de mano en tono verde pistacho a juego con unos salones de ante de Gianvito Rossi. Por otro lado, al descender del avión a su llegada a Berlín, la Reina lució una chaqueta de punto muy fino en tono dorado, de la que luego se desprendió.
