A 48 horas de que tenga lugar la confirmación de su hija Leonor, doña Letizia continúa con su agenda oficial en Madrid, y asiste esta mañana a una reunión de trabajo con la FEDEPE (Federación Española de mujeres directivas, ejecutivas, profesionales y empresarias) en el marco de los actos conmemorativos del 30º aniversario de sus premios. Después de impactar hace justo una semana con su estreno de moda más llamativo del año, un mono denim de volantes, hoy la Reina recupera su imagen más sobria para acudir a este acto. Ha preferido tirar de fondo de armario y recuperar un sencillo pero muy acertado vestido gris perfecto para un look de trabajo de mañana como este. Eso sí, ha querido aportar un toque más primaveral al sumarle complementos a contraste.
Un look totalmente favorecedor
Fue hace dos años, en marzo de 2019, cuando vimos este diseño por primera vez, también en un acto de mañana con otra de las organizaciones con las que trabaja de manera habitual. Se trata de una pieza entallada muy femenina de silueta lápiz sin mangas confeccionada en un tejido gris con estampado príncipe de Gales, un patrón que parece haberse establecido como uno de los preferidos de la Reina en los últimos años. Este modelo agrega un discreto escote en pico y un juego de asimetrías que crea un falso efecto wrap, un juego visual que se hace más patente en la falda, donde el cambio de print en los cuadros simula un corte cruzado en el diseño.
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Cambio de complementos
Mientras que el día que estrenó este vestido lo combinó con accesorios negros, en esta ocasión ha querido innovar para otorgar una nota más primaveral. De esta manera, ha optado por reciclar su bolso blanco de Furla y sus salones bicolores de Magrit, un original par de puntera negra y talón claro. Sí que ha mantenido su cinturón fino, detalle que realza aún más el cuerpo y que doña Letizia adora. Como es habitual, ha lucido su adorado anillo dorado de Karen Hallam, regalo de sus hijas.
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