La alegría por volver a celebrar galas (siempre con la máxima seguridad) se palpaba en las palabras de todos los invitados a los Premios Feroz 2021. Sin embargo, los looks de las asistentes han estado marcados por la sobriedad del negro. Desde Pilar Castro, presentadora de la gala, hasta Paula Usero, nominada a mejor actriz de reparto, han sido muchas actrices -con estilos y edades muy diferentes- las que han elegido este color para la antesala de los Goya. Por eso, cuando Macarena Gómez, nominada también a mejor actriz de reparto, aparecía con un vestido rojo amapola, instantáneamente se convertía en foco de atención, aunque posiblemente se trate de uno de sus looks de alfombra roja más discretos así como un diseño que ya estaba predestinado a ella.
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En cada una de sus apariciones en eventos y galas, Macarena Gómez sabe cómo impactar. Suele lograrlo con llamativos estampados o con diseños repletos de pailettes -por ejemplo, el vestido con 'efecto serpiente' que lució en los últimos Goya-. Sin embargo, esta noche no ha necesitado ni uno ni otro para, en su línea, alegrar la alfombra roja, sorprender... y también convertirse en una de las más elegantes. La actriz de La que se avecina ha hecho gala de su amor por la moda con un vestido de su diseñadora favorita, Teresa Helbig, -en quien confía para prácticamente todas sus citas con los flashes- del que podría haberse enamorado hace meses.
El diseño, con una preciosa caída en las mangas y en la falda hasta el suelo gracias a la gasa, cuenta con un bordado en chenilla y microcristales de inspiración china en el cuerpo. También el cuello mao, reforzado con tiras de terciopelo como los hombros y la cintura, apoya esa estética oriental, que contrasta enormemente con el estilo romántico del resto del diseño. Se trata de un vestido que pertenece a la colección Otoño/invierno 2020/2021 de Teresa Helbig, presentada en enero de 2020 en Madrid Fashion Week. Resulta curioso que Macarena no haya preferido un vestido de la última colección de la diseñadora catalana, correspondiente a Primavera/verano 2021. Sin embargo, ya en enero del pasado año, en los Premios Goya, llevó un vestido de esa misma temporada, algo que ha vuelto a hacer después, con lo que podría tratarse de una colección especial para ella.
Bautizada como Opium, la propuesta estaba inspirada en los viajes de los británicos a las ciudades chinas para comerciar en 1840. Dominaban los tonos neutros -beige, nude y negro, fundamentalmente-, excepto en dos looks: el vestido de lentejuelas que llevó en los Goya 2020, antes de la pandemia, y el diseño rojo con el que hoy, un año después, ha alegrado esta gala de premios. Para completar el precioso diseño, la actriz ha llevado joyas de Rabat (pendientes dobles de oro blanco con diamantes talla brillante -5.180 euros-, pulsera esclava de oro rosa -1.030 euros-, y tres anillos de oro rosa) y una mascarilla también roja que, con una cadena simulando un piercing, ponía su toque roquero al look.