Ayer vivimos un día histórico para la realeza británica durante la misa con motivo del día de la Commonwealth, pues la Familia Real se reunía casi al completo en el que era el último acto oficial de Meghan Markle y el príncipe Harry como senior royals antes del conocido popularmente como Megxit o Sussexit. Oportunidad en la que, además, veíamos volver a reunirse a los cuatro fantásticos, como se les conoce a estos junto a los duques de Cambridge, en una imagen para la posteridad en la que la duquesa de Sussex triunfó con un vestidazo de estilo superwoman frente a Kate Middleton que apostó por una imagen más comedida. Sin embargo, esta última parecía guardarse un as en la manga, ya que mostró su faceta más majestuosa horas después en una cena de gala en el Palacio de Buckingham.
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Si durante la misa con motivo del Día de la Commonwealth Kate apostó por reciclar un look elegante, pero muy relajado, también quiso recuperar un estilismo por la noche. Sin embargo, en esta ocasión, puso especial énfasis en una imagen mucho más deslumbrante y majestuosa. Para ello, recurrió a su vestidor de hace cuatro años y volvió a llevar un diseño inolvidable que mostró durante su viaje oficial por India en abril de 2016.
Concretamente para esta cena con motivo del 25º aniversario de la organización Place2Be, de la que es su patrona, Kate recuperó un vestido en color royal blue, con cuerpo y mangas transparentes bordadas con con cuentas y lentejuelas y falda lisa. Una creación de Jenny Packham que llevó durante una gala benéfica en el Taj Mahal Palace Hotel en Bombay (India); una celebración cuyo dress code estaba inspirado en Bollywood, la industria cinematográfica del país asiático y que la duquesa interpretó a través de este modelo, al que acompañó de un chal a juego sobre sus hombros.
Como hiciera hace cuatro años, Kate Middleton ha combinado su vestido royal blue con un clutch a juego que estaba también bordado con cuentas y lentejuelas formand formas florales. Accesorio que también iba firmado por Jenny Packham. Por su parte, si en aquella ocasión llevó sandalias, en esta prefirió una imagen más majestuosa con salones de glitter en tono metalizado, modelo Romy de Jimmy Choo. Por su parte, busca unificar su look con unos pendientes al tono.