Después de vivir el pasado viernes un San Valentín repleto de actos oficiales en Huelva y Cádiz, en los que nos dejaron imágenes para el recuerdo que demostraban una vez más su complicidad, los Reyes retoman su agenda este lunes en Madrid. Esta mañana han presidido juntos la entrega de los Premios Nacionales de Investigación 2019 en el Palacio de El Pardo, una cita en la cual doña Letizia ha estrenado un conjunto sencillo pero con toques de tendencia que le aportan un toque muy fresco y cañero. Si el año pasado optaba para este mismo evento u look sobrio protagonizado por un diseño reciclado de cuadros gris, hoy cambia radicalmente de estrategia y se decanta por un nuevo vestido con el que presume de cintura de avispa.
La Reina ha optado por el color más infalible de todos, especialmente en época de invierno: el negro. Sin embargo, a pesar de su versatilidad, este tono no suele ser una de sus opciones habituales. Es cierto que la luce en numerosas ocasiones, pero siempre en pequeñas dosis, y prácticamente nunca en un conjunto monocolor como el de hoy. Una de las grandes ventajas de apostar por un total look de este tipo es que resulta altamente estilizador y alarga visualmente la silueta, por lo que hace parecer más alta. De hecho, es uno de los grandes trucos de estilo de mujeres como Eva Longoria y Victoria Beckham. En el caso de doña Letizia, escoge como prenda principal un vestido negro de punto que no habíamos visto hasta ahora, un diseño con ligero escote bañera drapeado, manga larga ligeramente acampanada y falda midi de silueta lápiz perteneciente a COS, una firma que no había lucido hasta ahora.
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Para potenciar aún más su esbelta figura, lo ha combinado con un cinturón ancho efecto fajín a tono decorado con falsas tachuelas en relieve, un complemento de tendencia firmado con el que combinó su falda de flores hace poco más de un mes. En cuanto al calzado, prescinde de saldalias o stilettos para darle un toque más moderno al look al sumarle sus adoradas botas de Steve Madden. Se trata de un par con efecto segunda piel en ante negro que cuentan con puntera afilada y alto tacón de aguja y que han copiado numerosas princesas, duquesas y reinas europeas.
En cuanto a las joyas, recupera unos pendientes muy especiales, el par desmontable de Bvlgari que le regaló la marca cuando nació la princesa Leonor. En esta ocasión, prescinde de las aguamarinas colgantes en forma de lágrima y lleva únicamente las criollas de diamantes y oro blanco. De nuevo, opta por el anillo circular dorado de Karen Hallam que le regalaron sus hijas y que no se quita en ningún acto público. Como look de belleza, prescinde por un día de su habitual peinado voluminoso con las puntas hacia fuera para optar por un acabado más liso y pulido con raya al medio. Lo que no varía es su maquillaje, con favorecedor efecto buena cara conseguido con maquillaje en tonos tierra, labial nude con discreto acabado brillante y ahumado de ojos rosado.