Siguiendo su agenda oficial, esta mañana don Felipe y doña Letizia han asistido al Congreso de Clausura de la Conmemoración del 50 aniversario del Parque Nacional de Doñana, en Almonte. Una cita en la que la Reina ha sacado su faceta más flamenca añadiendo un vestido de lunares a su colección. En concreto, se trata de un diseño en blanco y negro con efecto 3D, firmado por Emporio Armani, de largura midi y falda plisada, con mangas 3/4 acabadas con un detalle de volantes. Sin embargo, en esta ocasión el Rey le ha robado parte del protagonismo en lo que a estilo se refiere gracias a la original combinación que ha escogido para la ocasión.
Su majestad ha vuelto a recurrir al traje de chaqueta, la prenda estrella de su vestidor, de la que solo prescinde para sus looks más relajados. Don Felipe ha escogido un modelo con un discreto estampado de cuadros que hace agua entre las tonalidades grises y marrones, y lo ha combinado con una camisa en color azul cielo y zapatos marrones de doble hebilla y el complemento estrella que ha puesto la nota diferencial, su corbata. Un diseño con un original estampado de flores en rojos y azules que coordinaba su estilismo con el de la reina Letizia.
No es la primera vez que su majestad se decanta por esta fórmula para renovar sus conjuntos más formales, siendo las corbatas estampadas una constante en su vestidor. Precisamente, Felipe recurrió a un estilismo muy similar el pasado mes de septiembre para asistir a las audiencias en el palacio de La Zarzuela que marcaban el fin de las vacaciones y el inicio de su agenda oficial. Aunque en aquella ocasión el Rey optó por un traje azul marino de raya diplomática, su corbata presentaba un estampado muy similar y mantenía las tonalidades rojas y azules. No obstante, esta vez se ha alejado de los prints más clásicos como ese y ha apostado por un suave efecto de cuadros de lo más original.