La primera alfombra roja del año, la de los Globos de Oro, ha puesto el listón por todo lo alto en cuanto a vestidos de fiesta se refiere este 2020. A la espera de ver qué sucede en los Oscar, que se entregarán el próximo 9 de febrero, Renée Zellweger o Ana de Armas ya impactaron a sus fans a su llegada al Beverly Hilton Hotel. Sin embargo, hubo una actriz que las superó a todas, según la votación en la que participaron los lectores de Hola.com. Tras conocer los resultados, ha sido Cate Blanchett quien se ha impuesto con su original look al resto de invitadas de la noche. Su apuesta fue un diseño de Mary Katrantzou con el que venció la superstición que hay alrededor del color amarillo en los vestidos de gala, llevándose el reconocimiento del público. Y es que el diseño de la actriz, un look que creó la estilista Elizabeth Stewart, resultó el preferido de los votantes.
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El vestido realizado por la diseñadora griega se caracteriza por el que es, desde sus comienzos, su hilo conductor: el arte. Quien vea sus desfiles no puede evitar pensar en obras andantes, ya que las referencias a los movimientos artísticos como el art decó o el futurismo forman parte de su ADN. No podía ser menos el diseño de alfombra roja elegido por Cate Blanchett. El de la actriz fue una de esas fantásticas creaciones que casi parecen irreales, que se mueven entre lo delicado y el barroco más sobrecargado. La artista es experta en crear efectos visuales, algo que se vio reflejado en la forma de las mangas, hipnóticas a la vez que sorprendentes.
El tono amarillo claro que escogió para la prenda recordaba tanto a las túnicas que aparecen en los papiros del Antiguo Egipto (algo en lo que coinciden también los plisados) como a la silueta redondeada del sol, un resultado de impacto que, sin duda, ha sido el que ha convencido a los lectores para regalarle su voto. No fue la única sorpresa del look: los detalles del pecho -realizados sobre tul transparente en color gris metalizado-, llevaban abalorios con forma de gota de diferentes colores y bordados sobre la tela. Un detalle que actuaba a modo de joya y a la vez potenciaba la personalidad atrevida de la intérprete australiana mediante las transparencias.
A juego con el color pajizo de la pieza, Cate añadió también unas sandalias amarillas de Stuart Weitzman, un calzado de plataforma delantera con el que no solo pasó la noche con comodidad, sino que mantuvo la monocromía. Por mucho que el vestido no necesitara complementos gracias al adorno del pecho, la actriz sí quiso añadir algunas joyas. Pendientes, pulsera y anillo a juego, todo de Pomellato, fueron las piezas discretas que complementaban la composición de alfombra roja sin llegar a sobrecargarla.
Siguiendo de cerca a la actriz, Renée Zellweger es quien se llevó la medalla de plata de estilo en la opinión de los lectores. A diferencia de la ganadora, la estadounidense se alejó del camp del diseño amarillo, prefiriendo la simplicidad de un diseño Armani que resaltaba su tipazo. La firma italiana vistió a la protagonista de Judy, quien resultó vencedora del premio en la categoría de Mejor actriz de drama, con un estilismo en azul pastel con suaves líneas plateadas. Cerrando los primeros puestos, Ana de Armas es quien ocupó la tercera posición con un diseño de lentejuelas y 'efecto wet' firmado por Ralph & Russo.