Kate Middleton rescata su vestido verde con mensaje poderoso
Aunque canceló su participación en los Tusk Conservation Awards, se reunió de forma privada con los finalistas y su look no ha pasado desapercibido
A última hora debido a que uno de sus hijos estaba enfermo, Kate Middleton canceló ayer su participación en la ceremonia de entrega de los Tusk Conservation Award en el Empire Cinema in Leicester Square de Londres, acto al que sí acudió en sus ediciones de 2018 y 2013. Sin embargo, sí que quiso reunirse de forma privada con los finalistas a estos galardones en el Palacio de Kensington. Un encuentro inesperado del que han transcendido muy pocas imágenes. Sin embargo, lo que sí adivinamos es que la duquesa de Cambridge ha querido recuperar un vestido verde al que acompaña un poderoso mensaje.
De color verde oliva, botonadura lateral en la cadera y manga larga, su vestido midi de línea evasé pertenece a Beulah London, una firma con una historia comprometida tras su nombre. Fundada por Natasha Rufus Isaacs y Lavinia Brennan en 2011 tras un viaje solidario a la India, su objetivo es empoderar a la mujer aportando facilidades a mujeres con pocos recursos para su inserción social y laboral y luchar contra su explotación social. Gracias al triunfo de su firma que dona parte de sus beneficios para esta causa, han fundado su propia asociación benéfica The Beulah Trust en 2013 con la que han desarrollado una misión humanitaria que tiene como objetivo conseguir subvenciones para que mujeres que han sido víctimas de tráfico sexual y abuso accedan a cursos con los que puedan encontrar trabajo, generar ingresos y vivir una vida autosuficientes libre de abusos.
Bautizado con el nombre de modelo Yahvi (632,50 euros), Kate personalizó este vestido al modificar el puño de las mangas que originalmente se presenta acampanadas con volante. Además, y siguiendo sus trucos estilísticos que le han llevado a convertirse en la royal que mejor marca cintura, acompañó este diseño de un ancho cinturón al tono. Culiminó su estilismo en el Palacio de Kesington con unos zapatos de ante a juego con tacón de 8,5 centímetros, de Gianvito Rossi (628 euros).
La duquesa de Cambridge estrenó este vestido el 22 de enero de 2019 en un acto benéfico en Lewisham, un municipio al sur de Londres en el que se sitúa la organización Family Action que se encarga de ayudar a padres e hijos en situación de pobreza. En aquella ocasión, el diseño ya se mostró modificado en sus mangas y también lo acompañó de un cinturón. Sin embargo, se decantó por un modelo en piel de efecto cocodrilo que llevó por primera vez en 2014 y del que se desconoce su firma. Lo que si eran iguales, eran los zapatos que eligió.
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