El look de Leonor que podría reemplazar a sus vestidos
La princesa de Asturias impactó en su segundo debut apostando por el color de la suerte de doña Letizia
Segunda cita de altura para Leonor en Cataluña. El debut de la princesa de Asturias ha continuado este lunes con el discurso que pronunciaría en los Premios Princesa de Girona 2019, una tarea con la que empieza a sentirse cada vez más familiarizada, teniendo en cuenta lo reciente que fue su estreno dedicando sus primeras palabras en Oviedo. En aquella ocasión, y consciente de que todas las miradas recaerían sobre ella, quiso sorprender estrenando su primer look de fiesta, un diseño en su color insignia -el mismo que lució esta mañana reuniéndose con los premiados-. Quedaba por descubrir si para la entrega de galardones que reconoce la labor de jóvenes en diferentes ámbitos, seguiría el camino que empezó hace unas semanas de desmarcarse del estilo de su hermana, la infanta Sofía, y volar en solitario (en cuanto a armario se refiere) o si, por el contrario, volvería a coordinar su estilismo con ella. La mayor sorpresa fue que la hija mayor de los reyes acudió con un look en el color que su madre reserva para las grandes ocasiones: el rojo, todo un aliado para mostrar una imagen segura.
Cada mujer de la realeza parece tener una pieza icónica. Para Kate Middleton es el abrigo evasé, para Meghan Markle el trench, para Máxima de Holanda los tocados... El equivalente en el armario de Leonor no sería otro que el vestido de largo a la rodilla o ligeramente sobre ella, un diseño que le funciona especialmente en dos variantes, la silueta corola -herencia estilística de doña Letizia- y con forma de 'A'. Es precisamente esta última la que llevó en su acto en Cataluña con un giro totalmente nuevo que podría sentar precedente en su armario, ya que optó por un modelo de manga larga con chaqueta a tono. Un dos piezas relizadas en tweed, el tejido que comparten ambas princesas en sus respectivos armarios.
El toque final de su combinación lo pusieron sus infalibles bailarinas. Un calzado plano -cómodo y elegante- que, por usarlo en todo tipo de citas y llevarlo en un sinfín de tonos, equivaldría al stiletto para el armario de las royals por su versatilidad. Es precisamente el complemento el detalle con el que las princesas se permiten jugar, haciendo que se coordine con su look o creando contrastes haciendo que los colores choquen de manera vibrante. Igual que su madre, Leonor se aseguró la jugada con una estética minimalista de una sola tonalidad. Un look monocromático en rojo de la cabeza a los pies.
Por su parte, la infanta Sofía, quien deja ver una personalidad algo más atrevida con sutiles puntos, volvió a dejar salir su carácter, más seguidor de las tendencias, a través del vestidor. Como su hermana, apostó por un vestido con una serie de diferencias. Atrás quedó el look de la mañana en color azul con el que dejaban ver, una vez más, su sincronía. La cita en el Palacio de Congresos de Barcelona significaba que su hermana volvería a convertirse en el centro de atención, por lo que apostó por un estilismo a la altura de las circunstancias pero que no robara el protagonismo.
Su diseño, en color blanco y de manga corta, llevaba un drapeado en la cintura sobre el lado izquierdo coronado por un semilazo, el acabado salido de pasarela que viene influido por la estética de los 90. Al igual que Leonor, la hija pequeña de los reyes de España escogió bailarinas como toque final de su look, aunque las suyas se encargaron de sumar puntos de estilo ya que eran doradas y obra de Pretty Ballerinas.
El discurso políglota de la princesa Leonor en los Premios Princesa de Girona 2019