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Esta semana representantes de gran parte de las Casas Reales europeas han volado hasta Japón para presenciar un acontecimiento histórico, la entronización del emperador Naruhito. Después de dos jornadas de celebraciones, don Felipe y doña Letizia pusieron rumbo a Corea con motivo de un Viaje de Estado que tenían organizado, pero algunos de sus homólogos decidieron quedarse una noche más y asistir a una recepción organizada en la residencia del emperador en Tokio. Este fue el caso de Mary de Dinamarca, que sorprendió con un diseño nupcial, y de Máxima de Holanda, que volvió a demostrar su absoluta maestría a la hora de elegir looks para las grandes citas.
La reina de los Países Bajos es de sobra conocida por su característico gusto atrevido, al que se mantiene fiel mientras integra en sus conjuntos las últimas tendencias en moda. Sus elecciones en el día a día suelen ser acertadas y muy comentadas, pero, sin duda, su punto fuerte son los looks de gala o de fiesta, en los que brilla especialmente. Ha dejado claro en numerosas ocasiones que no le importa repetir, de hecho, al igual que doña Letizia, logra disimular su constante 'reciclaje' de ropa cambiando los accesorios, el peinado o el maquillaje. Anoche volvió a repetir estrategia y consiguió un resultado insuperable, un perfecto estilismo con el que culmina su maratón de estilo en Asia.
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Máxima fue una de las mejores vestidas de la noche gracias a un mono en tono vino de Jan Taminiau, su modista de referencia y en el que confía habitualmente en las grandes citas. Se trata de una sencilla prenda de tirantes con escote recto y pantalones palazzo que transformó mediante fabulosos y brillantes complementos reciclados de uno de sus looks de gala más fascinantes. La absoluta protagonista fue la pequeña capa a tono, un adorno que se ha convertido en el preferido de otras royals para marcar la diferencia, como Mary de Dinamarca, Meghan Markle o doña Letizia. La de la reina de los holandeses es una pieza corta cuajada de pedrería con cuello barco que conforma una original abertura en el escote con efecto cut out, otorgando un punto más atrevido y de tendencia al conjunto.
Completó con un bolso de mano a juego que también habíamos visto ya, aunque lució la tercera parte del conjunto que le quedaba por estrenar, un cinturón confeccionado en los mismos materiales. El pasado septiembre, la Reina asistió al simbólico acto de la apertura del Parlamento en La Haya con un nuevo vestido del diseñador holandés que contaba con silueta entallada, una creación que acompañó de la citada capa, de hecho, en un principio parecía que se trataba de una sola prenda, pero hoy ahora descubierto que es desmontable. Se trata de una pieza altamente sofisticada capaz de transformar cualquier conjunto , claro ejemplo de ello es la última elección de Máxima, que convierte un mono minimalista en un auténtico lookazo.
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