Juliana Awada desafía el 'dress code' en el Teatro Real de Madrid
Apostó por un potente estampado animal para una noche de concierto y actualiza las normas de estilo entre las primera damas
Si la primera vez que Juliana Awada pisó Madrid como primera dama fue en su visita oficial después de que Mauricio Macri fuera elegido como presidente, este lunes su retorno a la capital española ha tenido un motivo muy diferente. Y es que la argentina ha acudido, al Festival Únicos, un encuentro musical que este año se ha organizado en el Teatro Real, reuniendo a los mejores artistas de uno y otro país. Para Juliana, que calificó la experiencia de ver actuar a los artistas como "un placer", el paso por la ciudad no ha significado solamente disfrutar de un espectáculo que buscaba unir ambas naciones. También ha querido demostrar que, en materia de estilo, puede seguir sorprendiendo atreviéndose incluso con tendencias que hasta ahora no había lucido. Como la que escogió para la presentación del evento por la noche, el animal print que ha convencido a diseñadores como Roberto Cavalli, Giambattista Valli o Dolce & Gabbana.
Haciendo gala, como es habitual en ella, de su elegancia personal -una de las cualidades que más aprecian sus fans de todo el mundo-, la primera dama escogió un vestido blanco moteado para el evento nocturno con tintes culturales. De manga corta abullonada, el diseño llevaba el cuello retorcido dejando un sutil escote a la vista por el corte con forma de ojo de cerradura. Ceñido al talle con el objetivo de marcar la silueta, a continuación el tejido se drapeaba alrededor de la cadera para caer después, de manera fluida y de forma asimétrica.
Precisamente en la falda se escondía otro de los originales detalles del modelo, ya que al ser desigual, simulaba un largo midi a un lado mientras que en el otro cubría el pie por completo con un volante hecho en la misma tela. Dejando que las manchas fueran las que marcaran el color de los complementos, Juliana se limitó a añadir accesorios en negro: un minibolsito con asa de cadena y unas sandalias de tacón con pulsera. Ya que el original cuello llamaba por sí solo la atención, redujo las joyas al mínimo agregando únicamente un reloj plateado.
Si bien Juliana se ha atrevido anteriormente con otros estampados como los geométricos, rayas, lunares o florales -los motivos primaverales son sus favoritos ya que los repite constantemente-, es poco o nada habitual que defienda un diseño animal print en público, algo que comparte con otras primeras damas como Melania Trump o Brigitte Macron, quienes prefieren colores lisos. Sin embargo, y ya que se compara a menudo su armario con el de doña Letizia, no sería tan desdeñable sospechar que, con la excusa del viaje, se ha animado a salir de su zona de confort para visitar el país de quien es uno de sus iconos de estilo.
Y es que los motivos inspirados en el pelaje animal como las manchas de leopardo o la piel de la serpiente, no faltan en el armario de la reina de España. Quien lo combina en forma de vestido, abrigo, falda ya sea en marcas de lujo como en firmas más asequibles y, por lo general, cuando se trata de citas diurnas. Por su parte, Juliana Awada podría haberse animado a dar comienzo a una nueva era de estilo con el que es uno de los estampados característicos de doña Letizia, a su manera, eso sí, ya que lo reservó para una ocasión más formal volviéndolo el recurso más elegante de la noche.