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Después de la intensa promoción de su último gran estreno, Avengers: Endgame, Scarlett Johansson ha pasado buena parte del verano alejada del foco mediático. Ha sido el Festival de Venecia el lugar donde la actriz ha reaparecido para iniciar su agenda de trabajo, esta vez para presentar Marriage Story, una cinta que aleja a la intérprete del universo de los superhéroes ya que aborda el proceso de divorcio de una pareja, y donde comparte pantalla con Adam Driver y Laura Dern. En la segunda jornada de la Mostra, Scarlett ha demostrado que ni siquiera las modelos que allí se congregan pueden ecilpsar a quien es la actriz mejor pagada de la industria.
Con una nube de fotógrafos a ambos lados de la alfombra roja, la neoyorquina ha deslumbrado con un vestido wet rojo brillante de Celine. Una propuesta con escote palabra de honor con un sutil drapeado en la zona del abdomen y una abertura lateral que se eleva casi hasta la cadera y ayuda a estilizar la silueta, alargando visualmente la longitud de las piernas. El look, creado por Molly Dickson, estilista habitual de la actriz, se completa con unas sandalias de tiras en la misma tonalidad, firmadas por Stuart Weitzman. Como toque final, ha optado por un pendiente tipo ear cuff con una gran cadena de eslabones. Cediendo todo el protagonismo al diseño de Hedi Slimane, director creativo de la firma, la actriz ha optado por un peinado de efecto mojado para mantener su melena retirada del rostro sin necesidad de apostar por recogidos elaborados. El maquillaje, obra de Frankie Boyd, centra la atención en la mirada, maquillando los ojos con sombras de color tierra y bronce y proporcionando un acabado ahumado al look.
No es la primera vez que Scarlett opta por esta fórmula de estilo para asistir a una alfombra roja. En una de sus últimas apariciones, pudimos verla con un diseño que guarda varias similitudes con la propuesta rojo brillante de Celine. En aquella ocasión eligió un modelo plateado de Versace, también con escote palabra de honor y abertura lateral, si bien el largo se mantenía a la altura de la rodilla. Como toque final se decantó igualmente por unas sandalias de tiras de la misma tonalidad que el vestido.
Por segundo año consecutivo, Scarlett Johansson se ha convertido en la actriz mejor pagada. Tal y como revelaba la revista Forbes hace apenas unos días en su conocido ránking, su fortuna supera los 50 millones de euros. Una cifra que, gracias al taquillazo de Avengers: Endgame, se ha incrementado considerablemente respecto a sus ganacias en los dos años previos. La intérprete, que está rodando Black Widow, donde se pone en la piel de la superheroína Viuda Negra, se sitúa en la lista por encima de actrices como Sofía Vergara, Reese Witherspoon o Nicole Kidman, que ocupan las siguientes posiciones.
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