Estamos acostumbrados a que las royals nos muestren su faceta más sofisticada a través de los estilismos que escogen en actos oficiales, donde suelen abogar (salvo excepciones) por detalles de tendencia. Sin embargo, reinas, princesas y duquesas han dado con la manera de otorgar una nota divertida y original a sus conjuntos sin salirse de la estética propia de la realeza, y es a través de su joyero. Aunque a priori imaginemos sus collares, pulseras y broches como piezas clásicas y atemporales, lo cierto es que cada vez son más las que escogen diseños inspirados en animales de lo más inusuales: abejas, libélulas, murciélagos... ¡e incluso gambas! La última en sumarse a esta tendencia ha sido la reina Camilla y lo hace tan solo 24 horas después de que Máxima de Países Bajos rescatará sus enormes broches con forma de araña.
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Estamos acostumbrados a que las royals nos muestren su faceta más sofisticada a través de los estilismos que escogen en actos oficiales, donde suelen abogar (salvo excepciones) por detalles de tendencia. Sin embargo, reinas, princesas y duquesas han dado con la manera de otorgar una nota divertida y original a sus conjuntos sin salirse de la estética propia de la realeza, y es a través de su joyero. Aunque a priori imaginemos sus collares, pulseras y broches como piezas clásicas y atemporales, lo cierto es que cada vez son más las que escogen diseños inspirados en animales de lo más inusuales: abejas, libélulas... ¡e incluso gambas! La última en sumarse a esta tendencia ha sido la reina Camilla y lo hace hoy mismo, tan solo 24 horas después de que Máxima de Países Bajos rescatará sus enormes broches con forma de araña.
Se puede decir que es una de las royals que más pasión tiene por las joyas con formas de insecto. Hoy 27 de marzo de 2024, la esposa del rey Carlos III ha sorprendido con dos originales broches durante su visita a un mercado de granjeros en Shrewsbury (Inglaterra). Allí, ha estrenado dos joyas prendidas en su pecho; una recrea una abeja y otra, una mosca. Con ellas, transformaba su abrigo cámel de corte clásico. No faltaba en su look sus botas de ante negro, de Russell & Bromley.
Ayer 26 de marzo de 2024, Máxima de Países Bajos acudía a un encuentro sobre salud mental en los jóvenes y el lanzamiento de la herramienta de apoyo MIND Us en La Haya. Allí, recuperaba una chaqueta gris de Natan que tiene desde 2010. Sin embargo, el clasicismo de esta prenda se transformaba al recuperar sus enormes broches con forma de araña, que tiene desde 2015.
Este broche, que luce habitualmente por duplicado como hizo el 27 de marzo de 2024, pertenece a la casa argentina Celedonio. En 2019, se podía adquirir a través de su tienda online bajo pedido, ya que se realizaba a mano de manera personalizada. Tenía un precio de 12.000 dólares (unos 10.685 euros aproximadamente).
En noviembre de 2018, la reina Letizia sorprendió al completar su estilismo con unos pendientes que, vistos de lejos, parecían tener forma de 'C'. Sin embargo, cuando las cámaras captaron primeros planos, pudimos comprobar que realmente se trataban de unas divertidas piezas de gambas.
Estas joyas que lució en Palma pertenecen, precisamente, a una firma mallorquina, Helena Nicolau, y todavía pueden adquirirse en la web de la marca por 190 euros.
Sin embargo, los pendientes 'animales' más icónicos de la mujer de Felipe VI son sus piezas de mariposas, un diseño de Elena C que atesora en su joyero desde 2013 y ha reciclado en numerosas ocasiones.
Están confeccionados en oro blanco y diamantes y, tal y como explicaba su creadora después de que la Reina los estrenara, representan "la belleza que todos llevamos dentro, así como la capacidad de transformarnos y superar las peores situaciones".
En octubre de 2018, apenas unas horas después de anunciar la noticia de su primer embarazo, la duquesa de Sussex posó ante los medios en Sídney con su primer look premamá. En uno de sus estilismos más especiales debido al dulce momento que estaba viviendo, quiso tener un recuerdo con Diana de Gales y optó por lucir unos pendientes de la que hubiera sido su suegra, que contaban con forma de mariposa.
La madre del príncipe Harry también los incluyó en su maleta para un viaje oficial, en su caso el tour a Canadá que hizo en 1986. Ella quiso combinarlos con una gargantilla a juego, de la que Meghan prescindió para conseguir una imagen más minimalista.
A pesar de no ser técnicamente una royal, la sobrina de los Reyes ha conseguido poner el foco en su vestuario y, sobre todo, en su original joyero. Es gran fan de los maxipendientes, especialmente los diseños en tonos metalizados, y, aunque suele apostar por piezas con motivos vegetales, el pasado junio sorprendió con unas decoradas por avispas doradas.
Los pendientes de la hija de la infanta Elena estaban firmados por la española Casilda Finat, y cuentan con cierre de avispa chapado en oro del que cuelga una piedra en forma de lágrima roja (25 euros).
Para la boda de su hermana Eugenia, celebrada en octubre de 2018, la princesa británica escogió un dos piezas azul eléctrico que acompañó de diadema a tono y un broche en forma de abeja que generó numerosos comentarios debido a su tierno significado.
La elección de este diseño se interpretó por la prensa británica como un guiño a la madre de las princesas de York, Sarah Ferguson, ya que su escudo de armas cuenta con una abeja e incluso el vestido de novia en su boda con el príncipe Andrés contaba con bordados en forma de este insecto.
Otro de sus complementos más llamativos la reina Máxima es el gran broche que emula a un escarabajo de ámbar, el cual lució en un acto en Ámsterdam en 2017 para otorgarle un punto diferente a su conjunto verde reciclado.
En abril de 2019, la Reina de los jordanos, que nos tiene acostumbrados a sus estilismos con toques transgresores, escogió un vestido de estilo étnico en tonos azules y negros que aderezó con unos pendientes que nunca imaginaríamos verle a una royal.
En aquella ocasión, Rania apostó por unos en forma de alas azules y negras con acabado puntiagudo que se inspiraba en la mitología tenebrista, y es que hacían un guiño a "las criaturas aladas que habitan en los bosques oscuros", tal y como señalaban desde su firma, Stephen Webster. Estaban confeccionadas a base de oro blanco de 18 quilates, Crystal Haze transparente y pavé de diamante negro.