Aunque el matrimonio Trump sigue fielmente las tradiciones, este 4 de julio quisieron empezar una nueva con el Saludo a América. El primer acto de este estilo organizado por el presidente de los Estados Unidos, tuvo lugar en el Monumento a Lincoln en Washington D. C., que incluyó además de su discurso, una exhibición aérea y fuegos artificiales. Para las ocasiones con cierto tinte patriótico como la del propio jueves o Acción de Gracias, ceremonias de especial importancia para los estadounidenses, la estrategia de Melania parecía ser clara, coordinar su estilismo con la ocasión apostando por el rojo, el blanco y el azul para el Día de la Independencia y el marrón, blanco y negro para la fiesta otoñal. Sin embargo, ya que se trataba del debut de la que podría convertirse en la nueva costumbre de los residentes de la Casa Blanca, ha roto su propia tradición. Los looks inspirados en la bandera del país han quedado atrás este año, su apuesta ha sido la de destacar de la mano de las últimas tendencias.
Consciente de cuál es la silueta que más le favorece, Melania Trump volvió a apostar por Carolina Herrera con un patrón al que saca partido cuando quiere resaltar su estilo de primera dama: de largo midi, ceñido al talle y con falda acampanada de silueta en 'A'. Si en otras ocasiones los colores de sus estilismos dejaban claro que hasta el armario de la primera dama apoyaba la causa, para el estreno de su marido en el evento escogió un look en blanco cuyo toque llamativo eran las franjas multicolores, que cruzaban el diseño a modo de arcoíris. Aunque la prenda es de escote simétrico, quiso darle un toque it dejando uno de los tirantes por debajo del hombro, un detalle que quedaba especialmente chic teniendo en cuenta los lazos que remataban la parte superior de la prenda.
La pieza -muy a la última, como la mayoría de las que forman parte del armario de la primera dama-, pertenece a la colección Resort 2019. Para la propuesta más veraniega, se utilizó como inspiración el estilo futurista de 1960, en concreto el que se llevaba hace casi 60 años en la soleada localidad de Palm Springs. El 'efecto Melania' ha sido imparable, las webs que tienen la prenda a la venta han acusado la aparición de la mujer del presidente. Y es que solo queda disponible, en pocas unidades, en talla M, ya que todas las demás se han agotado. El precio original de la prenda es de 2.895 euros y, actualmente, estando rebajado cuesta 1.447.
Si la recomendación de la firma es completarlo con salones de tacón en color empolvado, un tipo de accesorio que abunda también en el vestidor de Melania, prefirió ir un paso más allá sacando a la luz su personalidad más atrevida. La primera dama escogió como broche final unos tacones rojos tipo stiletto -puntera afilada y tacón fino- en un acabado de tendencia, el charol. Y es que este tipo de resultado brillante que recuerda al plástico es una moda a la que se han sumado la mayor parte de diseñadores esta temporada.