Cinco años después, Máxima de Holanda recicla sus accesorios infalibles

Tras su paso por Ascot, una ocasión en la que ha dejado el pabellón de su estilo por todo lo alto -con su combinación de vestido y tocado, cumpliendo a rajatabla la estricta etiqueta-, Máxima de Holanda ha vuelto a los Países Bajos para retomar su agenda. Y aunque lejos quedaba la jornada en las carreras de caballos, para su último evento, la reina de los holandeses mantuvo la esencia del torneo con un look que también podría haber llevado a la competición de hípica. Este miércoles fue la encargada de cortar la cinta por la reinauguración del Hospital Central Militar de Utrecht, y, ya que estaba de vuelta en su tierra adoptiva, quien es una de las royals más comprometidas con la promoción de la moda nacional y las tendencias, escogió a su firma de cabecera para la cita profesional, Natan. ¿La clave para aderezar el vestido en granate? Unos complementos que recicló de su armario a prueba de todo tipo de color cálido.

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Conocida por ser la reina del color, Máxima de Holanda es toda una experta en revelar su forma de ser mediante la ropa ya que siempre apuesta por tonalidades brillantes que revelan su personalidad alegre, escogió la paleta de rojos para la jornada. De la cabeza a los pies, lució diferentes sombras escarlatas en un look cuyo protagonista era el vestido granate con efecto óptico de manga larga y falda midi. Lo más original de la creación eran las transparencias del tejido, que parecía una versión sofisticada del ganchillo. Gracias a ello, dejaba a la vista la capa inferior del vestido, de tirantes y mucho más corto, un patrón muy similar al de su elección estilística durante su visita a Inglaterra. La combinación de las dos piezas permite llevar un corte mini sin que deje de ser sofisticado gracias a la superposición, una manera de atreverse con estos diseños de tendencia. Los vestidos texturizados semitransparentes como este forman parte del ADN del conocido atelier holandés Natan, firma a la que Máxima recurre a menudo.

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En los estilismos de Máxima de Holanda, los accesorios se hacen siempre con el papel protagonista, razón por la que siempre se habla de sus colecciones de pendientes o tocados. En esta ocasión, quiso crear un color block haciendo que la tonalidad borgoña contrastara con el rojo brillante de los complementos. Para ello recurrió a su fondo de armario y rescató algunos elementos que, con anterioridad, ya le habían dado un buen resultado integrados en mezclas de dolores cálidos: una pamela y tacones a tono en rojo oscuro.

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La pamela de ala ancha, obra de Fabienne Delvigne, combinaba a la perfección con un bolso a juego de asa corta. También en la misma tonalidad, el toque final lo pusieron los zapatos de tacón sling back que combinaban ante y plexiglás, una manera de renovar los clásicos stilettos sin perder un ápice de elegancia. Ambas piezas, que podrían parecer de estreno teniendo en cuenta el éxito del pvc en el calzado, las lució Máxima de Holanda en 2014 como se puede ver sobre estas líneas. Para la entrega de los Premios a la Libertad, la reina de los Países Bajos utilizó un vestido naranja probando cómo sus complementos pasaban la prueba con acierto, y convirtiéndolos en los broches perfectos para sumar puntos de estilo a las mezclas inspiradas en los colores del fuego.

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