En su segunda noche en Dublín con motivo de su Visita de Estado a Irlanda, los reyes de Holanda organizaron una velada muy especial como agradecimiento a las autoridades del país en la que se pudo disfrutar de una función de danza en el Dutch Dancetheatre de la capital irlandesa. Tras un triunfal elección de gala un día antes, la reina Máxima vuelve a apostar por las flores para su imagen como invitada, pero esta vez estampadas y no en encaje. De hecho, recupera un estilismo de fiesta muy favorecedor que ya llevó en 2016 también para acudir a un espectáculo de baile y música. Una combinación acertada en la que logra que su vestido midi de corte clásico se moderniza gracias a un nuevo look de belleza y al poder de los complementos, entre los que recicla los salones con detalles de vinilo que también acompañaron a este diseño el día de su estreno.
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Al igual que hiciera ayer por la tarde con su elección con lentejuelas, Máxima de Holanda ha confiado en la firma Natan para la elección de su vestido. Un diseño que se caracteriza por su estampado floral. Además, presenta la cintura estratégicamente entallada para compensar el volumen de la falda en línea acampanada.
La Reina jugó a la coordinación con sus pendientes. Gran aficionada a apostar por piezas fantasía de gran volumen, en esta ocasión, recurre a un modelo que fusiona piedras y diamantes en guiño étnico.
Máxima de Holanda jugó a la innovación al acompañar su vestido de unos zapatos con detalles de vinilo, aunque los coordinaba con su color para unificar el look.
No olvidó llevar un chal, accesorio que le está acompañando en sus últimos looks. Y como bolso, se decantó por uno de sus clutch en tono naranja, concretamente, por un modelo con cierre con forma floral.
Para la ocasión, Máxima de Holanda también apostó por un look de belleza diferente: labios en color rojo y melena con ondas fueron su triunfal apuesta.
Para mantener fijado su peinado, Máxima de Holanda incorporó a su imagen unas horquillas-joya con forma de espiga de trigo.
Máxima de Holanda ya llevó este vestido de Natan y sus zapatos de vinilo a juego en 2016. Fue su elección para acudir a la inauguración del Holland Festival en junio de 2016.
En aquella ocasión, Máxima de Holanda también acompañó su look de unos pendientes a juego, pero con una forma más llamativa. En cuanto a su look de belleza, optó por una imagen más clásica y no tan glamurosa como decidió en Dublín.