Melania Trump acierta con un vestido 'efecto traje' en su encuentro con la reina Isabel II
La Primera Dama estadounidense elige un diseño italiano para su primer acto oficial en Reino Unido y hace un guiño al estilo de Diana de Gales
Será un viaje exprés, pero la agenda está repleta de actos. Aunque solo durará tres días, la visita de Donald y Melania Trump a Reino Unido promete dar mucho que hablar. Ya en su aterrizaje en el Aeropuerto de Stansted en Essex (a unos 60 kilómetros del centro de Londres), la Primera Dama ha ocupado titulares debido a su estilismo, un traje navy combinado con una blusa estampada que, según se ha comentado en internet, recordaba a los uniformes de las azafatas. Tras este primer look, la esposa de Trump se ha cambiado para su encuentro con la reina Isabel II, el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles en el palacio de Buckingham. Y este segundo look, posiblemente, sí convencerá a seguidores y detractores.
Esta mañana, el Presidente de Estados Unidos y su esposa eran recibidos por el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles en los jardines de Buckingham. En Palacio, la reina Isabel II los esperaba. Para este encuentro tan importante que ha incluido varios actos protocolarios como la recepción de la guardia real, Melania ha elegido un vestido de una de sus casa europeas de cabecera, Dolce & Gabbana. Esta marca ha firmado algunos de sus looks más polémicos, como el colorido abrigo de 46.000 euros que llevó enSicilia hace dos años. Sin embargo, en esta ocasión ha preferido la sobriedad de un vestido con manga larga y falda a la rodilla en blanco -el mismo color que ha elegido la duquesa de Cornualles- con detalles en la cintura y el cuello en azul marino.
Gracias al cinturón, al cuello en contraste y a los botones del pecho, a primera vista el vestido podía parecer un traje de chaqueta y falda combinado con una camisa oscura, especialmente porque una de las últimas tendencias es llevar la americana por dentro de la prenda inferior. Además, el cinturón oscuro sobre la ropa clara ayuda a afinar visualmente la figura y a dibujar curvas, consiguiendo que Melania estuviera muy favorecida con el diseño italiano. Lo ha combinado con unos altísimos stilettos azules y una pieza poco habitual en ella: un sombrero, un accesorio que incorpora exclusivamente en ocasiones puntuales, como su encuentro con Brigitte Macron en abril de 2018, cuando también triunfó vestida de blanco.
El sombrero, un diseño de Hervé Pierre con inspiración boater reinventada en un estilo más formal, seguía la gama cromática del vestido, encajando a la perfección en el look. Pero además podría suponer un guiño al estilo de Diana de Gales, quien solía llevar este tipo de accesorios en esos mismos colores. Inclinado en un lateral de su rostro, el sombrero de Melania dejaba a la vista el elegante recogido bajo con el que iba peinada, así como su maquillaje, con mirada muy marcada, labios rosas y piel bronceada con un sutil contouring.