Una de las royals que más acostumbra a sorprender con sus propuestas es Máxima de Holanda, quien es considerada por sus fans como una de las reinas más atrevidas en cuanto a estilo volvió a dejar el pabellón de novedades bien alto en el Festival de Holanda en La Haya. Este miércoles, fecha en la que arrancó la inauguración de la cita, que tuvo lugar entre las paredes del Teatro Ámsterdam, recibió a varios artistas extranjeros, ya que el objetivo del evento es precisamente el de proyectar internacionalmente creadores de todo el mundo. Para una ocasión tan importante, y pese a que se ha convertido en toda una experta en reciclar prendas sin que parezca que las ha usado, la mujer del rey Guillermo fue de estreno con un top de Claes Iversen, que pertenece a la colección de alta costura de 2019, con un detalle arrebatador y mezclando varias tendencias díficiles de equilibrar: metalizados y brillos con volantes y asimetrías.
En el caso del top de Máxima de Holanda es el volante del lateral lo que primero llama la atención, ya que ha cogido lo mejor de las pasarelas de Isabel Marant, Saint Laurent o Marni, el escote asimétrico, y lo ha pasado por el 'filtro Iversen' añadiendo la manga con volantes. Pero no es lo más destacable del look. Y es que hay un detalle junto al lateral plisado que brilla a modo de broche, pero a la inversa, la auténtica genialidad de Clies Iversen: una abertura redondeada con apliques dorados que actúa a modo de escote de vanguardia.
El diseñador de origen danés se ha convertido en uno de los más reconocidos en los Países Bajos, donde ha desarrollado su carrera y ha recibido varios galardones premiando su trabajo. Se define a sí mismo como un creador de contrastes dentro de sus prendas, integradas a la perfección con líneas más simples. Son las aplicaciones peculiares, combinaciones innovadoras o el uso de materiales poco convencionales como anillas, volantes maximalistas o volúmenes que parecen salidos de Blade Runner lo que identifica a sus vestidos. Y, conociendo el estilo de Máxima, esto habría sido precisamente lo que ha conseguido que la reina de Holanda se haya fijado en sus creaciones, ya que es conocida en todo el mundo por jugar con el armario arriesgando en sus apuestas, que son de todo menos clásicas.
Sus abrigos y capas llenas de apliques no faltan en el armario de Máxima, quien ha llevado prendas del diseñador para todo tipo de citas, desde visitas oficiales en países extranjeros hasta actos de la agenda real sobre suelo holandés. Y es que, como otras mujeres de la realeza o primeras damas, la reina de los Países Bajos es muy consciente del efecto de su vestimenta en sus seguidoras, por lo que apoyar la trayectoria de los diseñadores nacionales es una de las tareas que se toma más en serio. Aunque eso no significa que no combine su armario más exclusivo con otras prendas menos vistosas.
De hecho, aunque podría haber llevado también el pantalón dorado a juego con el top, que era la propuesta del diseñador, Máxima le rebajó la formalidad unos cuantos niveles con un diseño más sencillo en color aceituna y unos stilettos metalizados. Lo que sí sumó puntos de brillo a su look fiebre del oro fue el bolso de mano a tono con el top que dejaba en evidencia que, ante la duda de si es o no recomendable combinar diferentes sombras de metales, para la reina de Holanda la respuesta está clara, sí y en abundancia.
El armario de Máxima de Holanda