En los últimos días, Victoria Federica se ha convertido en el centro de atención a su paso por la Feria de Abril, donde presidió su primer acto en solitario y reafirmó su evolución de estilo. Durante su estancia en Sevilla, mostró su imagen más sofisticada gracias a dos impactantes looks, uno protagonizado por un entallado vestido largo en tono rojo y otro mostaza que acompañó del tradicional tocado de peineta y mantilla. Sin embargo, una vez de vuelta Madrid, la hija de la infanta Elena retoma su rutina y recupera sus característicos estilismos informales para acudir un año más a disfrutar del Open de Tenis de Madrid.
Victoria Federica asistió ayer a la Caja Mágica junto a su padre para disfrutar del partido entre Fernando Verdasco y Karen Jachánov, donde coincidieron con la esposa del tenista, Ana Boyer, y con otros rostros conocidos como Sofía Palazuelo o Esmeralda Moya. Para la ocasión, la joven optó por un pantalón vaquero, básico imprescindible en su armario, en tono blanco, al que sumó jersey de cuello cisne en tono teja y una chaqueta muy llamativa que ha generado numerosos comentarios. Se trata de una gabardina de color gris oscuro con cuello camisero y cinturón incorporado que está decorada con un texto en la espalda.
En concreto, la frase que puede leerse es 'Because there is not planet B', es decir 'porque no hay planeta B', un eslogan reivindicativo a favor del medioambiente creado por la firma Ecoalf. Esta casa, creada por Javier Goyeneche, lleva una década luchando por la sostenibilidad y lanzando campañas de concienciación. De hecho, sus prendas están realizadas mediante materiales reciclados, y el 10% de los beneficios de la colección a la que pertenece la chaqueta de Victoria Federica son destinados a su fundación homónima, que busca limpiar los océanos de plásticos y demás basura. Con este gesto, la sobrina de Felipe VI ejerce como altavoz de la causa y demuestra su concienciación y su posición a favor de la moda sostenible.