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La expectación era máxima y hoy, por fin, hemos podido conocer al pequeño bebé Sussex, que aunque tiene apenas un par de días de vida ya ha generado miles de titulares y comentarios alrededor de todo el mundo. Después de algo más de 48 horas de descanso, Meghan Markle y el príncipe Harry han presentado a los medios a su primogénito, posando por primera vez como familia al completo. A pesar del misterio que continúa existiendo en torno al parto, puesto que los Duques decidieron romper ciertas tradiciones y mantener en secreto el lugar en el que ha nacido el pequeño, sí que han seguido el ejemplo de los Windsor al comparecer ante la prensa. Meghan ha vuelto a acaparar gran parte de la atención gracias a su rompedor look, pero esta vez ha habido alguien que ha conseguido robarle el protagonismo: el bebé que llevaba en brazos su marido.
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Nació el pasado lunes, pero 'baby Sussex' -todavía se desconoce su nombre- ya es toda una celebridad, y, tal y como ocurre con sus primos George, Charlotte y Louis, cabe esperar que su ropita vaya a ser analizada con lupa. De hecho, su primer 'estilismo' ya ha logrado causar un importante impacto, puesto que sus padres han escogido una prenda muy simbólica para la familia real británica.
Aunque la Duquesa ha querido ser fiel a su propio estilo al decantarse por un vestido estilo safari muy similar a otros que ha llevado en anteriores ocasiones en lugar de optar por los diseños clásicos y anchos que lucieron Kate Middleton y Diana de Gales al presentar a sus hijos, sí que ha buscado esa conexión con los bebés de la familia al envolver al pequeño en una toquilla muy especial.
El príncipe Harry ha sido el encargado de llevar en brazos a su primogénito, que estaba dormido y abrigado mediante una mantita blanca con pequeños detalles calados muy similar a las que lucieron los tres hijos de los duques de Cambridge en sus primeras apariciones públicas. De hecho, al igual que las de George, Charlote y Louis, pertenece a la firma GH Hurt & Son, aunque se trata de un modelo diferente. También es prácticamente idéntica a las que la princesa Diana utilizó en su posado tras el nacimiento del príncipe Guillermo y el del propio Harry. De esta manera, demuestran que, a pesar de que en ciertos aspectos son algo transgresores, los papás primerizos quieren mantener vínculos también a nivel simbólico.
Curiosamente, el recién nacido llevaba un gorrito de punto a juego con el arullo, un detalle que comparte tanto con Charlotte como con Louis de Cambridge. Sin embargo, George de Cambridge y los hijos de Diana de Gales y Carlos de Inglaterra llevaron la cabecita protegida con la propia manta.
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