En el Rose Garden de la Casa Blanca durante el aniversario de la iniciativa Be Best que se centra en el bienestar de los jóvenes, Melania Trump ha decido renovar su imagen con una prenda inusual en su armario, el vestido vaquero. Una elección que directamente conecta con los vestidores de royals que encuentran la aprobación de la crítica especializada por sus aciertos marcados por un impecable estilo y un espíritu innovador. Véase a doña Letizia o Meghan Markle, dos de las mujeres de la realeza que han confirmado esta tendencia como un éxito de sus looks de primavera o verano.
No es extraño ver a Melania Trump confiar en looks que se acompañan de prendas en denim. Tiene chaquetas, pantalones e, incluso, zapatos; pero, por primera vez, define su imagen como primera dama con un vestido en este tejido de algodón. Una apuesta vaquera a la que hizo un guiño el pasado mes de julio con un diseño camisero de Ralph Lauren que recordaba a esta tendencia.
Ahora sí, el vestido vaquero se confirma como otro de sus aciertos en moda. Bajo el nombre de Ellen (1.066 euros), encuentra el diseño perfecto para su innovador look en la firma Emilia Wickstead, una de las favoritas de las duquesas de Cambridge y Sussex. Una adquisición sin mangas y con largo midi que recupera el mismo patrón que aquel estreno en color verde con el que definió su imagen hace cinco días. Como complementos, se decanta por unos salones en tono nude con pulsera al tobillo.
Por otro lado, que su vestido se acompañe de un cinturón a juego hace más pareja su elección a las de las royals europeas. Hace un par de semanas, doña Letizia estrenaba un diseño en denim, el segundo que ya posee en su vestidor de tendencia. Lo llevó al descender por la escalinata del avión tras aterrizar en Marruecos y pertenecía a la firma Carolina Herrera.
Con su elección la Reina recordó a una elección del pasado verano con la que protagonizó una anecdótica coincidencia con Meghan Markle. El 26 de julio de 2018 casi a la misma hora, pero a 2.000 kilómetros de distancia, ambas royals apostaron por un vestido en denim: la esposa de Felipe VI lo hacía con una creación de Hugo Boss y la duquesa de Cambridge, con una de Carolina Herrera.