Desde que se confirmara la relación -y posterior compromiso- de Meghan Markle con el príncipe Harry, la prensa internacional ha realizado numerosas e inevitables comparaciones entre el vestidor de la duquesa de Sussex y el de su cuñada, la duquesa de Cambridge. Ambas están consideradas como dos de las royals europeas más elegantes, y cada una ha encontrado un estilo con el que sentirse cómoda sin alejarse del estricto protocolo británico. Mientras que la mujer del príncipe Harry ha destacado desde que llegó a la familia por sus looks modernos y de tendencia, Kate Middleton siempre se ha decantado por conjuntos más sofisticados y clásicos. Sin embargo, en los últimos meses se ha evidenciado una evolución estilística por parte de la esposa del príncipe Guillermo que, tal y como se acaba de revelar, tiene nombre propio.
Tal y como afirma la prensa inglesa, la duquesa de Cambridge ha contratado a una nueva estilista que está detrás de sus últimos aciertos y su progresiva transformación. Pero, ¿quién es esta misteriosa mujer a la que los medios llegan a denominar como 'el arma secreta de Kate'? Su nombre es Virginia Chadwyck-Healey, aunque se la conoce como Ginnie, y es una aristócrata de 36 años que ha trabajado más de una década como editora de moda. No resulta ninguna extraña para la Duquesa, puesto que estudió tanto con ella como con el príncipe Guillermo en la universidad de Saint Andrews -de hecho, asistió a su boda en 2011-, y estableció una gran amistad con la pareja que en los últimos tiempos ha desembocado también en una relación laboral.
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Tal y como revela el diario Daily Mail, Ginnie está sustituyendo a Natasha Archer, la habitual estilista de Kate, que está de baja por maternidad. Parece ser que la Duquesa podría haber aprovechado este cambio para modernizar su estilo sin alejarse en exceso de su característicos looks sofisticados e hiperfemeninos. Uno de los ejemplos más claros reside en que, poco a poco, está comenzando a renunciar a sus adoradas faldas midi evasé para apostar por otro tipo de líneas y largos en sus vestidos, e incluso se ha atrevido a lucir pantalones en citas formales, algo hasta ahora muy poco habitual en ella. No es que la Duquesa lleve siempre falda, pero sí que es verdad que normalmente reserva sus pantalones -que suelen ser vaqueros muy ceñidos- para los actos más casuales. Ese fue uno de los motivos por los que sorprendió tanto el conjunto con el que visitó el Henry Fawcett Children's Centre a mediados de marzo. Además, combinaba sus palazzo negros con una blusa con gran lazada al cuello, una de las nuevas prendas preferidas de las mujeres poderosas.
Otro de los cambios más significativos puede apreciarse en los pies de la mujer del príncipe Guillermo. Aunque los salones clásicos de tacón fino siguen siendo sus zapatos preferidos tanto para el día como para la noche, últimamente ha estrenado varios diseños que han logrado generar numerosos titulares y comentarios en redes sociales. A principios de febrero se sumaba a una de las tendencias en auge en los palacios europeos y se calzaba unos botines negros acordonados por encima del tobillo de L.K.Bennett, que contaban con un tacón alto pero ancho y completaban su sorprendente vestido verde (casi) flúor de la casa Eponine. Tan solo un mes después volvía a sorprender estrenando unas botas de tacón negras efecto legging muy similares a las que posee doña Letizia, un modelo muy rompedor que la Duquesa agregaba a su vestido de estampado 'pavo real'.