El icónico Museo Nacional del Prado, que celebra sus 200 años de historia, ha sido la localización escogida esta edición para entregar los Premios Nacionales de la Cultura, un reconocimiento por la contribución al reconocimiento del patrimonio cultural de España correspondiente, en esta ocasión, al año 2017. Los Reyes han presidido este acto que homenajeaba, entre otros nombres destacados, a la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada, los periodistas Matías Prats y Rosa Montero o el escritor Fernando Aramburu. Para esta cita con lo mejor de la cultura de nuestro país, Doña Letizia ha confiado en uno de sus éxitos más recientes: el vestido bohemio que estrenó el pasado noviembre en su viaje a Perú.
Malva, rojo, gris... incluso blanco y negro; el álbum de la Reina en las ediciones anteriores de los Premios Nacionales de Cultura incluía todos estos tonos, pero nunca en una misma versión tan colorista como la que ha elegido esta noche. Reciclando un vestido estampado de la firma Intropia que estrenó a finales de otoño, Doña Letizia ha sorprendido al dejar de lado el estilo lady, el largo midi y las siluetas ceñidas que suele elegir para esta entrega de galardones. Sin embargo, sabía que apostaba sobre seguro con este cambio de registro ya que este vestido, que lució por primera vez el pasado noviembre y que recordó enormemente al estilo setentero de Doña Sofía, le reportó reconocimientos en todo el mundo.
Hoy también ha optado por unos pendientes largos, de Tous, para acompañar los detalles brillantes del look, aunque el resto de accesorios han sido distintos: ha obviado el clutch rojo que llevó en noviembre y ha reemplazado los stilettos acharolados que lució en noviembre por un diseño de ante con pulsera al tobillo de la firma Lodi. Pero no son estas las principales diferencias entre ambos estilismos, sino que tenemos que enfocarnos en su peinado para encontrarla. Mientras en aquella primera ocasión combinó su vestido bohemio con un peinado ondulado del mismo estilo, esta noche la Reina ha preferido su clásica melena lisa, recuperadno el brushing que hace años convirtió en una de las claves de su imagen.