Con 41 años recién cumplidos, Amal Clooney es un icono de estilo atípico. No forma parte del mundo de la moda (aunque el año pasado fue una de las anfitrionas de la famosa gala Met de Nueva York), tampoco suele asistir a muchos desfiles en las semanas de la moda ni suscribirse a las tendencias que definen cada temporada. La abogada posee una forma de vestir muy personal pero que convence a muchas mujeres amantes de los looks clásicos pero no sobrios, sofisticados pero no previsibles y elegantes pero no aburridos. Hace solo un día, deslumbraba con un vestido vintage de Stéphane Rolland, una pieza que fue diseñada hace una década y que Amal lució con acierto en una cena organizada en el Palacio de Bunckingham. Hoy, en otro acto público al que ha acudido en compañía de su marido George Clooney, la activista ha vuelto a demostrar su buen gusto con un sencillo estilismo que favorece especialmente su silueta esbelta.
La cita ha tenido lugar en Edimburgo, donde la pareja ha acudido a la gala benéfica People's Postcode Lottery, en la que ambos han recibido un reconocimiento a la labor humanitaria que desarrollan a través de la organización Clooney Foundation for Justice. Para la ocasión, Amal ha optado por un mono azul marino formal pero sencillo, fiel a su estilo y con una silueta recta sin grandes detalles que favorece especialmente su figura. Para restar rectitud al vestuario, la abogada ha añadido un cinturón ancho que destaca de forma natural sus discretas curvas. Lejos de resultar demasiado sobrio, el escote asimétrico de la pieza proporciona un aire diferente al conjunto, que la mujer de George Clooney ha culminado con unos salones negros y un bolso de mano de estampado animal. Un accesorio que contrasta con el azul noche del mono y que funciona como el perfecto toque final.
Si bien algunos looks de Amal comparten similitudes, suele hace gala de un estilo ecléctico, donde hay cabida para multitud de prendas distintas entre sí. No obstante, en lo que respecta a su imagen de belleza, mantiene habitualmente la misma apariencia en la gran mayoría de sus apariciones. Su melena castaña, ligeramente ondulada y de largo por debajo del pecho es una de sus señas de identidad más reconocibles y siempre apuesta por lucirla suelta y peinada con raya lateral. Tampoco varía mucho su maquillaje, siendo partidaria de enfatizar la mirada con máscara de pestañas y pintar los párpados con colores oscuros (tonos tierra, negro...), eso sí, jugando con el matiz de intensidad según la hora del día y el tipo de evento. Para los labios, el rojo, el magenta o los tonos rosados suelen ser sus aliados.
El mono es una pieza que se repite con frecuencia en el vestidor de Amal, de quien se ha rumoreado en alguna ocasión que no cuenta con estilista, sino que se crea ella misma sus propios looks. Hace unas semanas, durante la celebración del comentado baby shower de Meghan Markle, Amal fue fotografiada con un vestuario monocolor rojo donde el mono - de la firma independiente Sergio Hudson- fue también el protagonista del conjunto.