Durante la presentación del primer y controvertido libro del actual Presidente del Gobierno (Pedro Sánchez: Manual de resistencia) el líder del Partido Socialista estuvo acompañado por Begoña Gómez. En un momento en el que la polémica envuelve a la publicación, la mujer de Sánchez no apostó ni por el rojo, ni por las camisetas con mensaje. Esta vez se decantó por un look armónico -casi blanco en su totalidad- y un traje de pantalón fluido con movimiento, sin embargo aunque hay un sutil giro en cuanto a su estilo personal, en esta ocasión las comparaciones con doña Letizia son inevitables.
Inevitables sobre todo después de que la Reina haya otorgado de nuevo su potencial al pantalón de traje blanco al recuperar la semana pasada el icónico look de su pedida de mano. Aunque Begoña mantiene su gusto definido por los básicos, es simbólico que replique esta opción tras el mediático viaje a Marruecos de los Reyes; pero también es representativo que escoja la neutralidad del blanco en momentos en los que conviene la discreción. En su caso, versionó el estilismo con un toque moderno gracias a una cazadora de piel con corte láser de líneas futuristas. Quizá una de las piezas más llamativas que hemos visto en ella desde su llegada a la Moncloa.
Una prenda que juega con las asimetrías en el bajo y que incorpora un sutil toque de color a esta apuesta en blanco níveo, gracias a las solapas gris en contraste. Por su parte, en cuanto a los complementos, rescató de su vestidor un calzado básico capaz de coordinarse con cualquier estilismo: unos pumps en tono neutro.
Aunque recurre a prendas en color blanco para dar luminosidad a sus sosegadas combinaciones, a lo largo de estos meses no ha sido habitual su inclinación por los diseños monocolor, salvo cuando se ha vestido de traje en clave working (como cuando viajó a Cuba el pasado mes de noviembr). La otra ocasión fue durante su viaje a Guatemala en noviembre de 2018. Begoña eligió para su primer acto (un encuentro con Primeras Damas) un vestido en color blanco. Una elección aplaudida que renovaba su vestidor y mostraba una imagen más fresca. En aquella ocasión, recurrió a la misma fórmula que recreó ayer, con zapatos nude en contraste.