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La Reina ha asistido la mañana del 6 de diciembre a una de sus últimas y más importantes citas del año; un acto solemne en el Congreso de los Diputados donde, además de rendir homenaje a la Constitución española en su 40 aniversario, ha vuelto a dejar claro cuál ha sido en 2018 su vestido (y color) favorito para las grandes ocasiones. Tras deslumbrar solo horas antes gracias a un modelo negro con falso escote en V, en su visita al Auditorio Nacional para presenciar el estreno de la sinfonía Carta Magna, la soberana ha aparecido en la carrera de San Jerónimo con el mismo diseño rojo que estrenó con motivo del primer viaje oficial de la princesa Leonor al Principado de Asturias; una prenda cargada de simbolismo que volvió a llevar semanas después en Roma y que ahora convierte en parte de la Historia de España al elegirlo de nuevo en esta fecha tan señalada.
Después de acudir a lo largo del año a varios actos organizados para celebrar el aniversario de la Constitución española, los Reyes han visitado este jueves el Congreso de los Diputados, junto a la princesa Leonor, la infanta Sofía y los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía, para presidir la cita más importante de este calendario de festejos. La Familia Real ha asistido a la recepción anual organizada por las Cortes Generales que en esta ocasión han tenido un carácter especial, por tratarse de un aniversario tan señalado.
A su llegada a las puertas del Congreso de los Diputados, la Reina ha desvelado su estilismo a los medios y curiosos agolpados a la entrada del edificio: un vestido rojo midi de manga larga, falda lapiz y lágrima en el pecho de Carolina Herrera que ha combinado con unos stilettos nude, un bolso sobre de ante y unos llamativos pendientes con pájaro sobre círculo de rubíes, pertenecientes a la Reina Sofía. Curiosamente la prenda elegida, es es la misma que estrenó el pasado mes de septiembre cuando la princesa Leonor visitó por primera vez de forma oficial el Principado de Asturias. Una coincidencia poco casual ya que ambas citas han sido dos fechas claves en el calendario de la Familia Real española, de ahí que la Reina se haya decantado en ambas por el corte que más la favorece, pero también por su color de cabecera.
Y es que, durante estos ultimos meses, la esposa de Felipe VI ha demostrado su predilección por esta tonalidad para las grandes citas. Ya sea en diseños con o sin mangas, lisos, con relieves guipur o en raso, la soberana apuesta siempre por esta tonalidad. Una seña de identidad estilística que ha paseado tanto dentro como fuera de nuestras fronteras y que comparte con otros miembros de las Casas Reales europeas como Máxima de Holanda, Victoria de Suecia o Mary de Dinamarca.
Pero no ha sido la primera vez que la Reina ha repetido estilismo. Semanas después de estrenar el vestido de Carolina Herrara en tierras asturianas, doña Letizia llevó de nuevo este modelo, durante su participación en la ceremonia del Día Mundial de la alimentación, celebrada el 15 de octubre en Roma; una cita en la que, contrariamente a la primera apareció con un elegante recogido; una apuesta que ha vuelto a repetir este 6 de diciembre.
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