El verano pasado Penélope Cruz hizo historia al convertirse en la primera española embajadora de Chanel. Un proyecto que ha coronado recientemente al ser considerada como Mejor Actriz Internacional en los premios Bambi 2018 por su interpretación en El asesinato de Gianni Versace. Un gran año para la madrileña que ha intensificado su presencia en las capitales de la moda. Su última aparición ha sido en Chanel Metiers D’Art 2018-2019, un evento de especial importancia para la casa francesa ya que el show rinde homenaje a los artesanos que participan en la creación de los diseños. Este año la colección ha tenido como escenario el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York convertido en el Templo de Dendur, del Antiguo Egipto, para recrear el eje de la colección. Entre sus invitadas más destacadas estuvo la actriz, que acudió con un vestido de fiesta con transparencias y plumas y volvió a ser una de las más elegantes de la noche.
La intérprete volvió a recurrir a su impecable fórmula de estilo a lo largo de estos meses, recreando una de sus siluetas favoritas con plumas y volúmenes estratégicos. En este caso escogió un vestido de noche de la colección Pre-Fall 2019 de Chanel que combinaba elementos característicos que forman ya parte del ADN de la marca. La parte de arriba tenía un falso escote transparente con corpiño de apliques de flores cosidos a mano; la falda estaba cuajada de plumas en azul y negro. Como complementos, optó por unos tacones negros peep toe, joyas discretas y un bolso bordado. Este llamativo diseño recordaba al que lució en los Premios Emmys, donde también fue una de las mejor valoradas de la gala.
Para esta cita en Los Angeles eligió un inolvidable diseño de alta costura de Chanel, con escote palabra de honor. La impresionante falda de vuelo en seda y tul estaba adornada con 8.000 piezas entre las que se incluían las finas plumas y abalorios cosidos enteramente a mano y nos conquistó a todos.
También Cannes fue testigo del 'efecto Penélope'. Durante el festival de La Croisette no solo presentó su primera colaboración con Atelier Swarovski (llevó unos llamativos pendientes de diamantes diseñados por ella) sino que impactó con un sugerente y majestuoso diseño negro recordandonos que pocas como ella saben llevar las plumas, el encaje y los volúmenes con tanta maestría. Sin duda, este 2018 ha sido una oda a la sofisticación y a la siluetas ultrafemeninas gracias a la actriz.