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El 2018 ha sido, sin duda, un año clave para el príncipe Nicolás. A sus 19 años, el nieto de Margarita de Dinamarca parece haber encontrado en la moda una gran vocación, y en los últimos meses ha podido ver como su carrera como modelo despegaba de la mano de dos de las firmas de referencia del sector. En febrero sorpendía al debutar sobre la pasarela de la London Fashion Week en el significativo último desfile de Christopher Bailey para Burberry, y parece que su trabajo convenció, puesto que en junio repitió la experiencia, esta vez en París. En ese caso, fue Dior Homme la casa que le fichó para participar en la Semana de la Moda Masculina, y no solo eso, sino que además le otorgó el privilegio de ser el que abriera el show, lo que hacía presagiar que su idilio con la industria solo acababa de empezar, algo que corroboran los últimos acontecimientos.
Nicolás de Dinamarca ha volado hasta Tokio para volver a caminar para la prestigiosa maison francesa en un desfile que ha reunido a numerosos rostros conocidos. La capital nipona ha sido el futurista escenario en el que se ha presentado lo último de Kim Jones. El revolucionario diseñador, que ha cambiado incluso el nombre de la línea masculina de la marca -antes Dior Homme, actualmente Dior Men- ha llevado hasta Japón sus primeras propuestas pre-fall, en las que la estética vanguardista y los tonos metalizados han adquirido todo el protagonismo. También ha habido lugar para conjuntos monocolor en negro, como el que ha lucido precisamente el Príncipe.
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En el prestigioso front row han convivido iconos de moda de diferentes generaciones, y cada uno ha interpretado las tendencias de esta colección a su manera. En el bando millenial, Bella Hadid, que posó junto con el rapero ASAP Rocky, y sorprendió con su estilismo, protagonizado por una sudadera dris de hombre presentada en el desfile que, tal y como explicó en sus redes sociales, personalizaron añadiendo unos centímetros extra al bajo para que pudiera lucirla a modo de vestido. También acudió la modelo nacionalizada japonesa Kiko Mizuhara, toda una estrella en el país.
Y, en cuanto a los más veteranos, destacó sin duda la presencia de la icónica Kate Moss. La top británica se decantó por un conjunto de estética working compuesto por pantalones tipo sastre de pequeños cuadros Príncipe de Gales, abrigo de corte masculino a juego y camisa en rosa empolvado con pequeños plisados. Completó el look con unos botines de tacón alto en negro. Tanto Kate como su compatriota David Beckham se fotografiaron junto a Kim Jones, y dejaron recuerdo de la noche tan especial en sus respectivas redes sociales.
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