La agenda de la Familia Real británica vive una de las semanas más familiares de los últimos meses. Si el pasado domingo la celebración del Remembrance Day reunía a Carlos de Inglaterra con sus hijos y nueras (y provocaba el primer duelo de estilo entre la Duquesa de Cambridge y Meghan Markle desde que esta anunciara su embarazo), el propio Príncipe será el protagonista del próximo encuentro ya que el 14 de noviembre cumple 70 años. Con motivo de esta señalada fecha, la Casa Real ha compartido unas instantáneas que si previsiblemente darán la vuelta al mundo por el carácter histórico de su publicación, también lo harán por otra razón: los curiosos estilismos que lucen Kate Middelton y Meghan Markle. Mientras la primera ha elegido un vestido de plena tendencia que en su momento viajó desde la boda de los Duques de Sussex hasta Zara, la segunda se ha mantenido fiel a la versión más clásica de su estilo, optando por un diseño que incluso podría ser repetido. Analizamos los detalles de sus elecciones estilísticas para este posado tan especial.
Unas horas antes de que comenzara oficialmente el 70 cumpleaños del Príncipe, se publicaban dos fotos del núcleo de la Familia Real británica, unos instantáneas tomadas en el jardín de Clarence House con Carlos de Inglaterra y Camila de Cornualles en el centro, sentados en un banco de madera junto a los dos hijos mayores de los Duques de Cambridge, Charlotte y George. Tras ellos y de izquierda a derecha, Kate Middleton con Louis en brazos, el príncipe Guillermo, el príncipe Harry y Meghan Markle. El armonioso resultado final se debe, en gran medida, a los tonos coordinados de la ropa que lucen todos ellos, puesto que en esta clase de posados ningún detalle se escoge a la ligera.
Por esa razón, resulta especialmente llamativa la elección de la Duquesa de Cambridge para estas fotos: un vestido azul marino con topos, cuello blanco y botones que mucha gente recordará como "el vestido más bonito de las invitadas a la boda de Meghan y Harry". Porque, efectivamente, una de las asistentes al enlace de los Duques de Sussex llevó primero ese vestido tan lady de la diseñadora Alessandra Rich. Fue la actriz Abigail Spencer, compañera de reparto de Meghan Markle en la serie Suits, quien desató la locura por este diseño, un fenómeno que llegó a tiendas asequibles como Zara y Uterqüe, pero también a armarios tan selectos como el de Ivanka Trump. La hija del Presidente de Estados Unidos también lució el pasado verano este diseño camisero de la colección de Primavera/verano 2019 de Rich que ahora recupera Kate Middleton.
Por su parte, Meghan Markle se suma a la armonía cromática de la fotografía con un diseño blanco con detalles negros de su firma de cabecera, Givenchy. El vestido ceñido con falda lápiz y cinturón negro recuerda inevitablemente al que lució a mediados de junio, en su primer acto en solitario con la reina Isabel II. El diseño que llevó entonces, también de Givenchy, cubría sus hombros gracias a una capa, una pieza que podría haber ocultado la parte oscura del escote que la Duquesa de Sussex luce en esta nueva foto. Y aunque por el momento la casa de moda francesa no ha confirmado que se trate del mismo vestido con una pieza desmontable, no cabe duda de que este look sintetiza a la perfección el estilo de Meghan Markle; incluso incluye uno de sus cortes favoritos, el escote barco. La silueta ajustada también permite adivinar que esta foto no ha sido tomada recientemente porque la tripita de Meghan Markle es inexistente. Según ha comunicado la Casa Real británica, se tomó el 5 de septiembre, más de un mes antes de que los Duques de Sussex anunciaran el embarazo.