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Si hace un par de días se atrevía con una falda dorada de Zara para asistir a la fiesta del 20 aniversario del diario La Razón, en otra celebración anual, la Noche de la Economía Valenciana, la reina Letizia regresaba a la sobriedad del negro aunque manteniendo la sofisticación que ha caracterizado sus últimas apariciones. Junto al Rey, Doña Letizia acudía a última hora de la tarde al Palau de les Arts Valencia para presidir la entrega de los premios que, cada año, la Cámara de Comercio de Valencia otorga a las mejores y más innovadoras empresas. Para la cita nocturna, la Reina recuperaba un diseño que estrenó en 2016 en París y que versiona, de la forma más femenina posible, el traje de etiqueta masculino. Se trata de un mono estilo esmoquin sin mangas, con escote en 'V' y ceñido a la cintura, una prenda muy elegante en negro que Doña Letizia completaba con algunos de sus nuevos accesorios favoritos.
En otra reinterpretación del esmoquin que se sumará al vestido blazer que llevó hace años y a otros estilismos de traje más recientes, Doña Letizia se decantaba esta noche por un mono negro de Hugo Boss que ya ha llevado en varias ocasiones. En 2016 lo hizo por primera vez, en un acto en París, y en abril de este año, por última, en unos premios literarios. En este diseño, los ribetes en tejido satinado que decoran el escote en 'V' recrean las formas típicas de la chaqueta que, según el protocolo más clásico, los hombres deben llevar en los actos de noche. La misma cinta satinada rodea la cintura del diseño, enfatizando las curvas femeninas y consiguiendo una silueta que, aunque inspirada en el esmoquin del hombre, resulta muy sofisticada y favorecedora. Además, gracias a la ausencia de mangas, deja a la vista los tonificados brazos de la Reina.
Mientras el pasado abril para la entrega de premios 'El Barco de Vapor' y 'Gran Angular', Doña Letizia optaba por añadir un toque roquero combinando el mono-esmoquin con accesorios en azul noche con tachuelas, hoy prefería la elegancia atemporal de los complementos en negro y las joyas de brillantes. Así, elegía dos accesorios de tendencia que ha llevado últimamente: el bolso trenzado Knot de Bottega Veneta y los zapatos peep toe de Magrit. Respecto a las joyas, la Reina recuperaba algunas de las piezas más especiales de su joyero. Gracias a su recogido, se podían ver los pendientes de diamantes negros, un diseño de Grisogono que ya llevó en un acto en Valencia, hace más de una década. En sus muñecas, las espectaculares pulseras gemelas de la Reina Victoria que lució hace unas semanas, en la cita previa a la entrega de los Premios Princesa de Asturias, una noche en la que también llevó un estilismo con el mismo dúo de total look negro y joyas de diamantes que ha elegido hoy.
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