Tras unos días cargados de emociones, en los que la Princesa Leonor leyó en público por primera vez justo cuando cumplía trece años y la Familia Real al completo se reunió por el 80 aniversario de Doña Sofía, los Reyes comienzan nueva semana acudiendo a la celebración de los 20 años del diario La Razón en Madrid. Si en los últimos actos a los que ha acudido junto a sus hijas ha decidido reciclar vestuario y cederles el protagonismo a ellas, para este evento, al que ha ido únicamente con el Rey Felipe, la Reina ha lucido una prenda de estreno con la que continúa renovando su imagen más rompedora y sofisticada: una falda plisada de Zara.
En sus últimos, Doña Letizia ha comenzado a mostrar una evolución en su vestidor que cada vez es más evidente -y que denota que escucha a la crítica-, mediante estrenos tan rompedores como las botas de cuero por encima de la rodilla que llevó en su maleta a Suiza la semana pasada o el mono inspirado en Hollywood con el que deslumbró en la inauguración de la nueva temporada del Teatro Real. Esta vez, se ha reinventado a sí misma y ha vuelto a recurrir a su tándem favorito, el que combina falda midi evasé y top básico, pero ha aportado un aire más moderno y apropiado para un evento de noche al cambiar las habituales tonalidades neutras con las que suele teñirlo por otras más rompedoras en las que ha habido lugar incluso para los colores metalizados, a los que no suele recurrir.
De esta manera, la Reina ha escogido un estilismo protagonizado por un conjunto compuesto a base de camiseta negra de cuello caja sin mangas y falda plisada de línea 'A' en tono oro envejecido. Le ha añadido abrigo negro de líneas clásicas sobre los hombros -tal y como lo suele lucir Melania Trump- y, para hacer frente al frío de la capital y de paso, conseguir un estilismo más moderno, ha agregado botas de ante XL con tacón fino de Magrit (muy similares a las que tiene en rojo). Como complementos, una sencilla cartera de mano tipo sobre de Nina Ricci y pendientes minimalistas dorados en forma de estrellas con una discreta cadena colgante de su casa de joyería fetiche, Gold & Roses. En cuanto al look de belleza, ha vuelto a rejuvenecer su rostro gracias a la coleta baja con mechones sueltos al más puro estilo Meghan Markle, y ha apostado por un maquillaje natural que destacaba su mirada mediante sombras rosadas.