Acaba de cumplir trece años, una cifra con la que la princesa Leonor se acerca a la adolescencia y que para ella significa, además, un aumento de actos oficiales como heredera al trono. El pasado 30 de enero, fecha del cincuenta aniversario de su padre, la princesa de Asturias recibió el Toisón de oro, la distinción mayor del Reino que Felipe VI le había concedido por su décimo cumpleaños, en 2015. Poco después llegó su primer acto oficial en Asturias con motivo del I Centenario de la Coronación de la Virgen de Covadonga, el XIII Centenario del Reino de Asturias y el Centenario de la creación del Parque Nacional de la montaña de Covadonga. Además, en el pasado desfile de las Fuerzas Armadas por el Día de la Hispanidad ocupó por primera vez su lugar como Heredera a la derecha del Rey. Ahora, con motivo de su cumpleaños, la princesa Leonor ha leído, bajo la atenta mirada del Rey y la reina Letizia, el artículo 1 de la Constitución en la que se ha convertido en su primera intervención pública.
Un acto que parece haber desvelado cuál es el color preferido de la heredera para estas ocasiones. Si el rojo se ha convertido en el tono más favorecedor para su madre, el azul parece el color elegido para las citas históricas de la Princesa. Para la ocasión ha optado por un vestido de cuello redondeado, con detalles, y manga francesa. Sobre el mismo, y para protegerse del frío, ha llevado un abrigo de corte clásico también azul, aunque en este caso era marino. Ha completado el look con unos zapatos de color esmeralda de la firma española Calzados Eli; un modelo muy similar al de su hermana, la infanta Sofía, que ha lucido en burdeos.
Basta recordar que en una de sus apariciones públicas más importantes, durante la imposición del Toisón de Oro, la princesa Leonor eligió un vestido en este tono. En aquella ocasión pudimos verla luciendo un vestido de manga francesa en un tono conocido como Serenity o Serenidad. Un matiz que favorece sobre todo a las melenas rubias y a las pieles y ojos claros, algo de lo que puede presumir la Princesa. Es, además, uno de los colores preferidos por la realeza europea y uno de los que la duquesa de Cambridge utiliza siempre que puede.
También eligió una tonalidad similar en la comunión de su hermana Sofía, celebrada en mayo de 2017. En aquella ocasión la Princesa lució un vestido con plisado y ribetes en el cuello y las mangas. Aunque el tono era más claro, la silueta y los detalles, guardaban un gran parecido con el que llevó en la imposición del Toisón de Oro. Además, en ambas ocasiones, y como suele ser habitual, la princesa Leonor eligió bailarinas de la firma española Pretty Ballerinas para completar su look. Sin embargo, al contrario que para su 13 cumpleaños, en aquellas ocasiones optó por recoger parte de su cabello con dos finas trenzas, un peinado más aniñado que podría haber cambiado con motivo de su entrada en la adolescencia.