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Los duques de Sussex comenzaron hace casi dos semanas un agitado tour por Oceanía que coincidía con su momento más dulce a nivel personal, puesto que la noticia del embarazo de Meghan Markle se hizo pública justo cuando el matrimonio llegaba a Sídney. Desde entonces, han visitado varios de los lugares más destacados de la geografía del continente, desde Australia hasta Tonga, Fiyi o Nueva Zelanda, que ha sido su última parada. En estos lugares, la Duquesa ha presumido de sus primeras curvas premamá mediante casi 40 looks que nos han permitido descubrir cómo va a ser su armario los próximos meses, tanto en los eventos más elegantes como en otros más casuales. El último conjunto que ha elegido, con el que pone fin a esta agitada gira, está protagonizado por una prenda poco habitual en ella que cuenta con un curioso efecto óptico.
Una vez más, ha apostado por la maison que creó su vestido de novia, la casa Givenchy, que está capitaneada por Clare Waight Keller, una mujer que comparte los valores que Meghan quiere transmitir a través de la moda. En este caso, se ha decantado por un conjunto compuesto por jersey de punto con cuello caja y manga francesa en azul marino -el modelo mismo que llevó en Irlanda en verde botella- y falda midi de línea 'A'. Este tipo de faldas trapecio tableadas no solían ser las favoritas de la Duquesa, que prefería lucirlas con siluetas lápiz y más ajustadas, pero sí que forman parte de su nuevo vestidor premamá.
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En concreto, ha optado por un modelo de punto entallado en la parte superior y con plisados en el bajo. Curiosamente, a pesar de que el tableado no es especialmente ancho ni llamativo, consigue un efecto 3D al combinar varias tonalidades en la zona inferior que simulan el efecto 'luces y sombras'. De esta manera, se unen distintos tonos de azul y marrón para aportar mayor volumen y movimiento. Sin embargo, la esposa del príncipe Harry no es la primera royal que recurre al truco de potenciar un plisado gracias al juego de colores, ya que esto mismo lo hizo la reina Letizia el año pasado con su comentado vestido blanco y negro de Hugo Boss que parecía contar con detalles tableados pero realmente se trataba de un efecto visual.
Para completar el estilismo, ha agregado sus infalibles stilettos marino modelo BB de Manolo Blahnik y los pendientes Disccologo Studs de Boh Runga, un regalo del Primer Ministro de Nueva Zelanda que ha lucido en varias ocasiones en estos últimos días.
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