El imaginario de la moda consigue revivir una y otra vez tendencias olvidadas que parecían impensables en pleno 2018. Fuera de su ámbito estrictamente deportivo, los leggings de ciclista han tomado las calles y han arrasado este verano entre las influencers. Las modelos internacionales Bella Hadid y Kendall Jenner, la española Jessica Goicoechea o la celebrity Kim Kardashian, quien, precisamente, ha hecho de esta prenda ajustada una de sus señas de identidad, han rescatado en los últimos meses esta complicada tendencia. Una prenda que triunfó 20 años atrás fuera de las cuatro paredes de un gimnasio y cuya pionera no fue otra que Diana de Gales.
Es de sobra conocido que la princesa británica siempre fue un paso por delante en cuestión de estilo. Era fotografiada en multitud de ocasiones con mallas multicolor acompañadas de jerséis amplios, construyendo unos looks que nos transportan irremediablemente a principios de los 90´. En esta época, los colores flúor y las prendas de estética deportiva se mezclaban sin temor al qué dirán. Aunque en la actualidad triunfan en la versión más sobria de color negro, Diana de Gales se atrevió con los fucsias, los naranjas o los complicados culottes blancos.
Precisamente, así fue como cerró el desfile primavera-verano 2018 de Off-White la modelo Naomi Campbell. La 'diosa de ébano' sorprendió al salir a escena con la insólita combinación de un blazer blanco con pantalones de ciclista a juego, en lo que supuso toda una premonición por parte de Virgil Abloh. El incoformista diseñador recurrió a los clásicos y se inspiró en los looks más deportivos de la princesa Diana para dar forma a su colección, unas propuestas a las que más tarde se sumaron grandes casas como Louis Vuitton, Nina Ricci o Yeezy, la firma de Kanye West, el marido de Kim Kardashian.
Su manual de uso actual consiste en despojarlo de sus reminiscencias deportivas para combinarlo con prendas totalmente opuestas como americanas, camisas masculinas, botas de caña alta y sandalias de tacón. Sin embargo, hay un accesorio que se repite como un mantra en los looks donde las mallas de ciclista adquieren todo el protagonismo. Si Diana de Gales optaba por maxibolsos de loneta, las influencers de hoy en día reducen este complemento a su mínima expresión en formato riñonera, otro clásico de los 80 que las grandes casas de moda se han encargado de rescatar para llevarlo a su vertiente más sofisticada.