No es ninguna novedad que la Reina Letizia es una de las royals más elegantes del panorama internacional y su estilo, uno de los más buscados, tal y como han demostrado durante las últimas semanas los medios de todo el mundo. Los looks de Doña Letizia, en los que combina prendas de las marcas más exclusivas con otras asequibles, son una gran fuente de inspiración, y la última en fijarse en ellos podría haber sido Victoria de Suecia. La heredera al trono sueco ya está de vuelta tras sus vacaciones estivales, y su agenda oficial esta de nuevo repleta de actos oficiales que nos están permitiendo descubrir sus favoritos de cara al entretiempo. Si hace apenas unos días volvía a apostar por una de sus prendas atemporales preferidas, ayer su elección nos recordó al vestidor de la Reina de España al apostar por su fórmula favorita.
Para asistir a la inauguración del Festival Bergmanen, celebrada en el Teatro Real Dramático de Estocolmo, la hija de Carlos Gustavo de Suecia lució un conjunto protagonizado por una falda muy llamativa. Se trataba de un diseño midi de vuelo, acabado satinado y motivos religiosos estampados de la firma MaxJenny! valorada en 2.500 DKK (unos 335 € aproximadamente) a la que ha añadido una sobria blusa de manga larga en tono crema. Como complementos, un bolso de mano tipo sobre en color coral de Stella McCartney y stilettos de ante a tono de Rizzo.
Este tándem que combina top básico y falda estilo años 50 estampada es uno de los más característicos del armario de la Reina Letizia, que aporta volumen a su figura y resalta su fina figura con él. Su versatilidad hace que esta combinación pueda ser lucida durante todo el año -únicamente bastaría con cambiar el largo de la prenda superior o añadir una chaqueta de cara al invierno- y a cualquier hora del día, tal y como nos demuestra la esposa del Rey Felipe VI. Sin ir más lejos, en los últimos meses ella ha lucido estilismos basados en esta fórmula hasta en cuatro ocasiones. La más reciente, durante un acto de la Fundación Mujeres por África el pasado 3 de julio, en el que eligió un total look de Adolfo Domínguez -una de sus firmas fetiche- compuesto por blusa básica con cuello caja y manga corta y falda gris con detalles florales azules y blancos. Al igual que Victoria de Suecia, le sumó bolso de mano -en su caso, de Felipe Prieto- y salones a tono de Magrit.
No solo en sus actos en España opta por este look la Reina, sino que también lo incluye en su maleta a lugares tan diversos como Inglaterra o Haití. En este último país deslumbró el pasado mayo con una falda blanca con estampado de flores en tonos rosas de la marca Sweet Matitos a la que agregó blusa sin mangas con escote cruzado para aportar un aire más veraniego y combatir las altas temperaturas caribeñas. Completó el conjunto con salones en rosa empolvado de Lodi, pendientes de Cool Look y el mismo clutch de Felipe Prieto.