Pudo haber sucedido en julio, cuando Felipe VI recibió en el Palacio Real Madrid a Emmanuel Macron, pero finalmente no fue así. El esperado primer encuentro entre la reina Letizia y la primera dama Brigitte Macron (y su correspondiente duelo de estilo) no se produjo entonces, porque las dos esposas no estaban en Madrid, pero sí sucederá esta semana, aunque el escenario ha cambiado. Será en París, concretamente en el Grand Palais, que desde hoy 3 de octubre acoge una exposición retrospectiva sobre la obra del pintor Joan Miró. Los Reyes de España viajarán hasta allí el próximo viernes para su inauguración oficial, a la que también acudirán el Presidente de Francia y su esposa y a la que seguirá una cena en el Palacio del Eliseo. Y en ambos actos obtendremos al fin la comparativa más directa entre el estilo de Doña Letizia y el de Brigitte Macron, un cara a cara del que podemos predecir ciertos detalles analizando las diferencias y similitudes en el vestidor de ambas mujeres.
La Reina se define por una actitud más atrevida que le lleva a incorporar nuevas firmas y estilos, con los que consigue looks impactantes. Así queda reflejado en actos de noche o de gala donde un vestido largo protagoniza su elección, o en apuestas más sorprendentes como el mono asimétrico de Pedro del Hierro que llevó en su última visita al Teatro Real. De diseños de taller de costura de líneas más clásicas como los que firma su diseñador de cabecera Felipe Varela a creaciones más de tendencia como el vestido con bordados de perlas y estratégicos cut outs de Ana Locking, su vestidor es heterogéneo.
Por su parte, Brigitte Macron arriesga menos en estilos, por lo que sus fórmulas a la hora de vestir se reducen y hacen más homogéneo un vestidor dominado por creaciones de Louis Vuitton o Balmain. No obstante, no por ello deja de sorprender. Por ejemplo, cuando se trata de vestir de largo, recurre a piezas con aberturas y bordados estratégicos, a menudo metalizados, que realzan su figura.
No obstante, Brigitte Macron tiene como favorita la fórmula de combinar un blazer de hombros realzados con un pitillo. Por su parte, doña Letizia juega con distintos cortes, aunque destacan estilismos donde apuesta por cortes que se entallan a la cintura y que incorporan el largo midi en faldas.
Como colores, ambas coinciden por haber llevado piezas en la gama de los rojos. Sin embargo, mientras que para la Reina es su tonalidad favorita, la primera dama lo incorpora a su vestidor de forma muy puntual. Para Brigitte, el blanco y el azul ganan la partida en cuestiones de moda. Eso sí, doña Letizia no duda en llevar diseños estampados, mientras que la primera dama prefiere los acabados lisos.
En cuanto estilos, las dos interpretan de forma actualiza cortes de inspiración retro. Sus elecciones sesenteras han hecho coincidir sus vestidores con estilismos que dejaban ver su lado más juvenil y atrevido al incorporar un corte mini que dejaba al descubierto sus piernas.
Tampoco faltan entre sus looks guiños a estéticas más rompedoras, como la roquera. Ambas logran interpretarla con pitillos, detalles de cuero o aplicaciones metálicas, como cremalleras vistas o tachuelas; y calzando unos botines de alto tacón.
Sus prendas de abrigo también participan en su juego de similitudes y diferencias. Doña Letizia vuelve a hacer acopio de una diversidad de tendencias entre las que encontramos desde un clásico trench a abrigos con lazada tipo batín o con detalles de volantes. Por su parte, Brigitte Macron prefiere diseños rectos, como su abrigo rosa de doble botonadura que protagoniza un símil con el que posee la Reina en un tono y estilo gemelo, aunque con estampados de florecitas.