Una de las fiestas más esperadas de la temporada en Nueva York es la gala de primavera del American Ballet Theatre, que se celebra en el Metropolitan Opera House de la Gran Manzana. Ayer, numerosos rostros conocidos se dieron cita en este evento vespertino; sin embargo, hubo una invitada que supo adaptar su elección de moda a la ocasión, pero sorprendiendo con una renovada imagen. La protagonista, la influencer neoyorquina Olivia Palermo. Acompañada de su marido, Johannes Huebl, rompió con su estética más definitoria para incorporar una prenda poco habitual en sus estilismos, un body lencero con encaje y transparencias.
Una prenda que seduciría a supermodelos como Kendall Jenner o Bella Hadid, pero que ahora llega al vestidor de Olivia Palermo con una función extra. Con ella, no solo se aleja de escotes a la caja o en V más propios, sino que logra recuperar un blazer de terciopelo verde que protagonizo uno de sus looks de hace más de un año. Curiosamente, con esta combinación, logra que este diseño conquiste su armario de primavera a pesar de ser una creación del invierno de 2017.
En concreto, Olivia Palermo llevó este diseño de terciopelo, doble botonadura y grandes bolsillos inspirados en el patrón de una sahariana para acudir a una cena en el restaurante Manko de París a principios de marzo de 2017. En aquella ocasión, decidió llevarla abotonado y suponer un fino cinturón para enmarcar su figura. En lugar de un pantalón acampanado como en su cita neoyorquina, la llevó con una falta larga también de terciopelo y salones de piel en lugar de sandalias.
Su escotazo también permite que Olivia otorgue un especial protagonismo a su colgante. Se trata de una de sus piezas favoritas y más icónicas, ya que ha protagonizado muchos de sus looks desde comienzos de esta década de los 2010. En oro y diamante, se trata de un diseño de la casa Cartier que reproduce la imagen de una cabeza de leopardo.