En el Teatro Goya de Madrid, doña Letizia ha presidido el acto oficial con motivo de la celebración del Día Mundial de las Enfermedades Raras. Para la ocasión, la Reina ha decidido estrenar un traje de chaqueta y falda de corte clásico, pero que juega con los detalles para volver a evidenciar este estilo transgresor y atrevido con el que nos sorprende. De forma muy sutil, lo que podía ser una pieza de fondo de armario básica, se moderniza con un ribeteado de cuero estratégico en la prenda con el que consigue definir su figura así como dar uniformidad a su vestidor de 2018 en los que este género se ha convertido en una de sus apuestas favoritas.
El guiño parisino de su nuevo estreno de Hugo Boss
Una falda recta, una chaqueta coordinada recta con cuello a la caja... pero un detalle en los bolsillos que nos recuerda a una de las consignas que ha definido algunas de las creaciones de Karl Lagerfeld para la casa Chanel: en lugar de presentarse lisos, se muestran con acabado desflecado. Para más énfasis, la Reina elige un micro-estampado que dado al entramado cruzado de las prendas se asemeja al tweed, un género que identifica a esta casa francesa y que, a la par, es uno de los que suele llevar doña Letizia, aunque siempre con combinaciones que le rejuvenecen. No obstante, este estreno pertenece al sello alemán Hugo Boss, uno de sus imprescindibles.
Coordinándose con el color negro de los ribetes en cuero de su traje, doña Letizia recupera de su vestidor uno de sus zapatos favoritos, unos salones acharolados de Prada. También en tono neutro, aunque realzado con aplicaciones metálicas, su bolso de Uterqüe que recientemente combinó con su abrigo de estampado animal. Como pendientes, también recuerre a una pieza que ha llevado en diversas ocasiones. Son largos y con perla, de Tous. También rescata su blusa, blanca y con plisados en el frontal.