Gigi Hadid diseña el zapato perfecto para las que no resisten los tacones

Cuando Chiara Ferragni diseñó su primera colección de zapatos convirtió un diseño de un ojo azul con pestañas en uno de los elementos protagonistas de sus creaciones. Era su sello de identidad y una imagen en la que, a primera vista, tal vez había podido inspirarse Gigi Hadid al pensar en la colección cápsula que ha lanzado con la firma de calzado Stuart Weitzman. Nada más lejos. El suyo es un ojo turco, la representación del mal de ojo. “El mal de ojo es un símbolo poderoso que protege de las energías negativas y se utiliza como amuleto. Tiene gran carga significativa y, además, es una imagen muy atractiva”, explicaba la modelo en la presentación de la línea.

Un amuleto que ella ha querido poner a los pies de todas sus seguidoras, y de las de la firma, en su segunda colaboración con la casa, la primera con Giovanni Morelli como director creativo. Partiendo de un modelo ya existente de mule, uno de los zapatos estrella del otoño, la modelo ha ideado dos nuevos diseños. El primero, Eyelove, con un único ojo adornando la parte superior del zapato, está disponible por un precio de 540 euros; el segundo, que ha denominado Eyelovemore, y en el que ha replicado varios ojos hasta lograr una figura geométrica, 650 euros. Cada modelo lleva el nombre de la modelo en la planta, igual que el packaging. Al esperado lanzamiento hay que sumarle un vídeo promocional dirigido por Cameron Duddy que ha trabajado en los videoclips de artistas de la talla de Bruno Mars o Jennifer López.

Esta colaboración tiene, además, un fin solidario. Refuerza el compromiso de la marca con la organización Pencils of Promise, y su intención de donar 105,000 dólares para construir tres escuelas en Ghana, Guatemala y Laos. “Los colores vibrantes en los que ambos modelos están realizados me recuerdan el último objetivo por qué diseñamos estos zapatos, ellos representan nuestro compromiso para construir tres escuelas”, apuntaba Gigi.

La modelo se afianza así también en el papel de diseñadora, un trabajo en el que se siente más que cómoda. Y es que, solo en este año, su nombre ha sonado junto a marcas como Maybelline NY, con quienes lanzó una colección de maquillaje; la firma Vogue Eyewear, que recurrió a ella para una colección de gafas de sol y graduadas; o Tommy Hilfiger con quien ya van varias colecciones presentadas en la Semana de la Moda de Nueva York. Colaboraciones, todas ellas, con un denominador común: se han convertido en un profundo éxito.