La tienda insignia de Bulgari, ubicada en la 5ª Avenida de Nueva York, se reabrió el pasado 20 de octubre con una recepción a la que acudieron más de 200 invitados. Entre ellos modelos y celebridades como Bella Hadid, Lily Aldridge o Jon Kortajarena que no quisieron perderse uno de los eventos más esperados del año. Tras el cóctel, los invitados fueron trasladados a The Met Cloisters, una sucursal del Museo Metropolitano de Arte dedicado al arte y la arquitectura de la Europa medieval, donde disfrutaron de una cena íntima organizada por Jean-Christophe Babin, CEO de Bulgari.
Bella Hadid, ataviada con un vestido joya asimétrico de Roberto Cavalli Coture, fue una de las invitadas más elegantes de la velada.
Uno de los momentos más divertidos de la noche fue cuando las dos modelos, Bella Hadid y Lily Aldridge, posaron juntas. Las dos lucían joyas de Bulgari.
La modelo y embajadora de la firma de joyería, Lily Aldridge, derrochó sensualidad en una noche llena de glamour. eligió para la ocasión un vestido palabra de honor y de corte sirena de Alex Perry Oficial.
El blanco fue uno de los tonos estrella de la noche y el elegido por Camila Cohelo para asistir a la fiesta de Bulgari. La bloguera eligió un vestido de Dior con la falda de tul. Su bolso, también en blanco y con tachuelas de colores, era de la misma firma.
Josephine Skriver se atrevió con un sensual vestido de terciopelo dorado de la firma The Feminine Unique. Las joyas, como cabría esperar, eran de Bulgari.
Sofia Richie fue una de las más afortunadas al lucir una de las más icónicas joyas de Bulgari, la gargantilla de serpiente. Una joya que combinaba perfectamente con el vestido de raso, palabra de honor, de Giorgio Armani.
La actriz Laura Harrier eligió para la velada un conjunto de blusa y pantalón, con estampado floral, de la firma Calvin Klein. Fue una de las pocas que optó por descartar el vestido como prenda estrella.
Danielle Bernstein sorprendió con un mono palabra de honor que combinó con una torera negra. Un conjunto que compañó con joyas de Bulgari.
La modelo Amilna Estevao optó por un mini vestido negro con cremallera fronral y volantes. Una de las propuestas más originales de la velada.
La modelo Jasmine Sanders eligió un vestido rojo, palabra de honor, de Fabiana Mazzi. Lo acompañó con sandalias de pulsera color nude y joyas de Bulgari.
Jon Kortajarena, un habitual en las fiestas de Bulgari, no quiso perderse el evento. Acudió con un pantalón de cuero, con flecos en los laterales, y una blazer, tipo esmoquin, de Ralph Lauren.
La cantante Ciara también se divirtió en la fiesta de Bulgari, y lo hizo ciñendo su cuerpo, al más puro estilo Kardashian, con un vestido negro de A.F. Vandevorst Couture. completó el look con unos zapatos de Loubloutin.
La tienda, de más de 4.000 metros cuadrados, fue rediseñada por Peter Marino, quien quiso recrear una vesrión atemporal de la antigua Roma. De ahí el uso de materiales preciosos, incluyendo finos mármoles, sedas y terciopelos de lujo, tanto en la decoración como en el mobiliario.
En la imagen la modelos Lily Aldridge, embajadora de la firma de joyería, posa junto a Nicola Bulgari.
La modelo y DJ Ruby Rose fue la encargada de amenizar el cóctel, celebrado en la flagship store de Bulgari. Pinchó algunos de los mejores temas de la música actual y consiguó que algunos de los invitados se arrancaran a bailar.
El polifacético fotografo Mario Testino también acudió al evento. Desconocemos si, a lo largo de la velada, tomó alguna instantánea o si se dio vacaciones en una noche como esta, pero lo cierto es que no quiso perderse la fiesta.
Demi Lobato posó durante el cóctel con un vestido color fresa, elaborado en satén, y lleno de pliegues que, después, cambiaría por un traje de chaqueta de lo más moderno y elegante.
La cantante se convirtió en una de las sorpresas de la noche cuando, en mitad de la cena, sorprendió a los invitados con una actuación musical.
Otra de las grandes sorpresas fue una performance escénica del bailarín Lil Buck. Un juego de cortorsionismos y movimientos al ritmo de la música que dejó boquiabiertos a los invitados.
La cena, organizada por Jean-Christophe Babin, CEO de Bulgari, tuvo lugar en un emplazamiento de lo más sorprendente: The Met Cloisters, la sucursal del Museo Metropolitano de Arte dedicado al arte y la arquitectura de la Europa medieval.