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"Traicionada". Es las palabra con la que Ágatha Ruiz de la Prada resume cómo se siente. La popular diseñadora, marquesa de Castelldosrius y baronesa de Santa Pau, ha concedido a ¡HOLA! su entrevista más impactante y reveladora para contar, por primera vez, cómo ha vivido su separación de Pedro J. Ramírez. "Ya habíamos superado varias crisis, pero resulta que ahora era el momento de nuestros hijos: tenían que casarse, ser padres… y espero no habérselo quitado con lo que ha pasado", explica, y añade: "Yo estaba con mi trabajo, él con el suyo, los niños (...) Protegía a mi familia contra viento y marea, y de repente, todo eso ha saltado por los aires". Para ella, lo más importante es "que no he perdido la cabeza en ningún momento, aunque, vuelvo a insistir, esté dolida en lo más profundo".
Ahora que han pasado siete meses desde su ruptura, afirma que emocionalmente se quedó "muy colapsada porque, durante treinta años, mi vida había estado pivotando alrededor de esa persona". La popular diseñadora relata que: "En cinco días se firmó todo (...) Todo se hizo por poderes ante notario. No quiero volver a verle, aunque para él no habría supuesto el más mínimo problema haber coincidido".
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La diseñadora, que asegura que "como mis padres se separaron y mi madre lo pasó terriblemente mal, siempre luché mucho por no separarme yo también", confiesa que la separación fue una sorpresa "total y absoluta" para sus hijos, ya que no sabían nada. "Pero nada, nada, nada. Además, ¿cómo iban ellos a imaginarse una ruptura semejante si durante treinta años han estado viendo la pareja tan sensacional que formaban sus padres, desde mi punto de vista?", se pregunta.
Eso sí, también reconoce que: "Tengo que ser honesta y decir que Pedro J. se ha portado bien, porque todo lo que me prometió me lo ha dado, incluso diría que un poquito más".
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